La designación de un pastor evangélico ajeno al mundo deportivo como nuevo ministro de Deportes de Brasil generó críticas de algunos atletas, preocupados por la cercanía de los Juegos Olímpicos de Rio-2016, y la felicitación de la autoridad del fútbol.
George Hilton sustituirá en la cartera a Aldo Rebelo, que pasará a ocupar a su vez el ministerio de Ciencia y Tecnología en el segundo mandato de la presidenta Dilma Rousseff, que arranca el 1 de enero.
La designación de Hilton, anunciada hace una semana, “decepcionó” a una agrupación de deportistas de todas las disciplinas, que incluye a figuras del fútbol como los exjugadores Raí y Cafú, los astros Kaká y Dani Alves e incluso al actual seleccionador Dunga, y también del voleibol como el entrenador Bernadinho y la medallista olímpica Ana Moser.
“En la víspera de los Juegos Olímpicos [faltan 584 días], la presidenta Dilma [Rousseff] abandonó la oportunidad de mejorar la gestión del deporte”, indicó el comunicado de la ONG Atletas por Brasil, que sostuvo que la designación de Hilton se basó en “un criterio únicamente político”.
Alejada de esta posición, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) manifestó su “confianza” en la designación de Hilton. “Debemos esperar sus acciones para después criticar o no”, dijo el presidente electo de la máxima entidad del fútbol, Marco Polo del Nero.
Hilton es diputado del PRB, un partido conservador de la coalición oficialista, y según la prensa brasileña, nunca propuso proyectos de ley relacionados con el tema deportivo durante sus siete años en el Congreso.
Fue investigado además en 2006 por las autoridades tras ser descubierto con 600.000 reales (hoy 220.000 dólares) en 11 maletas, que aseguró entonces eran donaciones de fieles de la polémica Iglesia Universal del Reino de Dios, de la que es pastor.
El nuevo ministro se defendió este martes asegurando que las críticas a su designación forman parte de una lucha política “injusta y desleal”.
“Estoy honrado con la invitación y apenas la recibí me impregné de humildad y motivación para desarrollar el deporte de nuestro país, comenzando con los niños, la base, hasta los jóvenes y adultos de alto rendimiento”, dijo en un comunicado.
Hilton no es el único nombramiento que generó rechazo en los cambios de gabinete de Rousseff, reelecta por un estrecho margen en octubre pasado.
El nombramiento de Katia Abreu, una hacendada y política influyente, en el ministerio de Agricultura también fue rechazado por ecologistas, indígenas y pequeños productores.
