La seremi de Salud de Aysén, Ana María Navarrete, realizó una serie de recomendaciones respecto al posible aumento en los casos de virus Hanta, ya sea por el trabajo que se desarrolla en los campos o la mayor concurrencia turística a estos lugares.

De esta manera y pensando en la temporada estival, se reactivó el comité regional de virus Hanta que reúne a instituciones públicas, civiles y militares y que tiene por fin prevenir la aparición de nuevos casos, tanto en la población permanente como flotante de la región de Aysén.

“Tenemos con eso un plan regional de manejo intersectorial, donde se van hacer distintas actividades como fiscalizaciones, además de medidas de prevención, acciones enfocadas a grupos de riesgo como son los trabajadores en zonas rurales, faenas y temporeros y la población expuesta a este tipo de riesgos. También a los turistas que ingresan a la región o a los turistas ayseninos, pero que también vacacionan en camping y lugares rurales”, señaló Ana María Navarrete.

Cabe recordar que el virus Hanta se adquiere por contacto con fluidos de ratones silvestres de “cola larga” (Oligorizomys longicaudatus) portadores del virus, principalmente a través de las fecas y orina que dejan en los matorrales o en espacios cerrados como cabañas y bodegas. Los aerosoles de esta orina son inhalados luego por las personas y ahí se produce el contagio.

La época de primavera y verano es propicia para la enfermedad debido a la mayor circulación de visitantes en campos y bosques.

“Todo lo anteriormente dicho tiene que ver también con una forma de autocuidado que esperamos que la población tenga después de todos estos años teniendo casos de Hanta Virus en la región y por lo tanto es muy importante que cada persona tome las medidas en caso de salir a zonas rurales o de encontrarse con lugares inhabitados por mucho tiempo”, agregó Navarrete.

El comité regional de virus Hanta tiene por objetivo mantener la capacidad de la red asistencial en el diagnóstico de la enfermedad, difundir vías de transmisión y factores de riesgo, además de fiscalizar el funcionamiento de los sistemas de agua potable, manejo de residuos, entre otros.