La máxima estrella de los Cleveland Cavaliers de la NBA, LeBron James, salió al paso de los rumores que apuntaban a un quiebre interno en la franquicia de Ohio luego de la discreta campaña que llevan.

Con 18 triunfos y 12 derroras, los Cavs se ubican en el quinto puesto de la conferencia Este, lejos de las expectativas creadas luego que se confirmara el retorno de James, quien se unía a Irving, a quienes se les agregaba Love, conformando, en el papel, un temible “Big Three”.

Luego de la contundente derrota a manos de los Detroit Pistons, James no tuvo problemas en entregar públicamente su apoyo a David Blatt, el experimentado entrenador de básquetbol que triunfó en Europa, pero que hace sus primeras armas en el mundo de la NBA.

Y si bien Cleveland tiene actualmente fuera por lesión a Kyrie Irving y Anderson Varejao, la abultada derrota ante un equipo con récord perdedor como los Pistons no estaba en los papeles de nadie.

“Él es nuestro entrenador. ¿Qué otro entrenador tenemos?”, sostuvo LeBron James una vez concluido el partido y en donde se vio errático y visiblemente molesto por el resultado.

Incluso, James cargó contra la prensa y aseguró que todo es un invento para aumentar los números de publicaciones vendidas de los diarios de Estados Unidos.

“Él es nuestro entrenador, pero para hacer una pelea entre Blatt y yo o el equipo y Blatt, es solo con el objetivo de vender. Es solo para vender y hacer que la gente lea y poner algo en el centro de atención. Eso es todo lo que es”, sentenció en declaraciones que recoge ESPN.