Ocho personas murieron en el incendio del ferry “Norman Atlantic” y 427 fueron rescatadas, según el último balance proporcionado este lunes por dos ministros italianos.

El número de 435 pasajeros suscita dudas, ya que faltan 43 personas con respecto a lo indicado en el rol de pasajeros. El ministro italiano de Transportes, Maurizio Lupi, instó sin embargo a tomar con prudencia la lista del barco.

Las operaciones de rescate del ferry, que comenzaron el domingo después de que se declarara un violento incendio a bordo, concluyeron con la salida del comandante de 62 años.

Durante más de 24 horas, las autoridades marítimas italianas, griegas y albanesas evacuaron a los pasajeros, helados de frío, y a los 56 miembros de la tripulación.

El siniestro causó siete muertos cuyos cadáveres fueron recogidos en el Adriático.

Los equipos de rescate se lanzaron el domingo por la mañana en una carrera contrarreloj para salvar a las 478 personas a bordo, que estuvieron atrapadas durante cerca de 34 horas en la cubierta del ferry, azotadas por vientes glaciales y envueltas en un humo espeso que dificultó la labor de los socorristas.

Unos 50 pasajeros rescatados llegaron este lunes por la mañana a Bari (sureste de Italia), visiblemente agotados, a bordo del buque “Spirit of Piraeus”, de bandera singapurense, según las autoridades italianas.

“La situación es buena” para esos supervivientes, en mayoría griegos, entre los que se encuentran cuatro niños y una mujer embarazada, comentó el prefecto de Bari, Antonio Nunziante.

“Lloraron y abrazaron a sus salvadores”, explicó a los periodistas reunidos en el puerto.

Otros pasajeros, unos 70, fueron dirigidos hacia Grecia.

Un intenso olor a quemado

En Bari, una de las pasajeras se mostró muy crítica con la tripulación del transbordador. Contactada por el canal italiano SKYTG24, denunció la evidente falta de preparación de la tripulación y lamentó que resultara imposible echar los botes al agua. “Tan solo se pudo echar uno al agua”, afirmó.

Fotis Tsantakidis, chófer de camión, contó al diario griego Ethnos que se despertó a causa de un intenso olor a quemado. “Salí corriendo. Buscaba un chaleco salvavidas, pero no encontré ninguno”, explicó, agregando que había podido embarcarse en el “Spirit of Piraeus” a pesar del fuerte oleaje que dificultaba la maniobra.

“Un italiano cayó al agua en ese momento, pero afortunadamente llevaba un chaleco salvavidas”, contó.

Un pasajero griego no tuvo esa suerte. Tras caer al agua junto con su mujer, permaneció cuatro horas en el mar al lado de su esposa, que contó su calvario a la agencia italiana Ansa.

“Vi morir a mi marido”

“Vi morir a mi marido. Intenté salvarlo, pero no lo conseguí”, explicó desde el hospital de Lecce (sureste de Italia) adonde fue trasladada tras su rescate.

La mayoría de los supervivientes salieron indemnes del incendio, pero sufren hipotermia o problemas respiratorios, según los socorristas interrogados por los medios italianos.

Roma movilizó cuatro remolcadores con el objetivo de estabilizar el “Norman Atlantic”, de 186 metros de eslora. Ahora que terminó la evacuación, debería ser remolcado hasta Brindisi, en Italia. El barco podría también ser trasladado a Albania, país situado a menor distancia, si fuese necesario.

El incendio se declaró el domingo de madrugada en la zona reservada a los vehículos en la embarcación azotada por los fuertes vientos y el oleaje. Los pasajeros, muchos de ellos italianos y turcos, habían zarpado del puerto griego de Patras rumbo a Ancona (este de Italia).

La compañía griega Anek fletó este ferry, de bandera italiana y construido en 2009, que había pasado con éxito una inspección el pasado 19 de diciembre. Según el armador italiano, se había detectado un problema en una de las puertas cortafuegos situada en el puente número 5, precisamente, donde el incendio se declaró, indicó el grupo Visenti, citado por la agencia Ansa.

A bordo viajaban principalmente griegos (268), turcos (54), italianos (44), albaneses (22), alemanes (18), suizos (10), y franceses (10), aunque también había rusos, austriacos, británicos y holandeses.

La fiscalía de Bari abrió este lunes una investigación criminal para intentar esclarecer las circunstancias del drama y encontrar a los responsables.