Una grave denuncia puso en el tapete el concejal de Valparaíso Carlos Bannen respecto a un contrato de asignación directa por más de 2.000 millones de pesos que el Serviu suscribió con la empresa que construye el denominado complejo habitacional de viviendas sociales Parcela 11, por concepto de un aporte complementario al presupuesto inicial.

El concejal explicó que se trata de la misma empresa contratista que construyó en el cerro La Cruz el proyecto habitacional Elbergh, y que en este caso de la Parcela 11 de Forestal en Viña del Mar el acuerdo se resolvió en un protocolo firmado entre el director del Serviu y el contratista.

Lo anterior, a juicio del edil, resulta irregular y no se ajustaría a los procedimientos habituales ya que el proyecto inicial siempre fue a “suma alzada”, es decir, con un valor fijo al que la empresa debía ajustarse.

Agregó que el Serviu –a partir de este protocolo– cancelará también al contratista cerca de $650 millones para compensar la paralización y desaceleración de las obras. Sin embargo la empresa tenía además un plazo fijo por contrato, por lo cual si no se cumple se deben aplicar multas y aquí esto no habría ocurrido, según Bannen.

Además afirmó que esta situación es a lo menos confusa y la comparó con el bullado caso Kodama, por lo que dijo que es necesario que se investiguen los hechos, sobre todo con sumas tan altas.

El caso, aseguró, será llevado a la Contraloría para que sea este órgano el que aclare las dudas que surgieron en torno a la firma de este protocolo entre Serviu y la empresa.