Tres personas fallecidas y cuatro heridos fue el saldo de una toma de rehenes a un céntrico café de Sídney, que comenzó la mañana del lunes y terminó la madrugada del martes hora local en Australia.

El secuestrador, uno de los muertos, era el refugiado iraní Man Haron Monis, de 50 años, con cargos por decenas de denuncias de abuso sexual.

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Libardo Buitrago, comentarista internacional, conversó con Podría ser peor para analizar este hecho que causó pánico en una de las ciudades más importantes del país oceánico.

El experto señaló que “ésta sería una acción de un lobo solitario, que no tuvo apoyo externo“. Además, Buitrago indicó que probablemente el desenlace ocurrió porque el secuestrador disparó primero, lo que obligó a la policía a responder y no tener una operación limpia para rescatar a las personas retenidas.

El analista también comentó que el iraní fue detenido varias veces por participar en protestas en contra de la presencia de fuerzas australianas en Afganistán. Además, “está acusado y vinculado, y estaba en libertad condicional, por una sospecha fundada que tenían las autoridades australianas del asesinato de su esposa“.

Enviaba cartas amenazantes y ofensivas contra los familiares de soldados australianos que habían sido muertos en Afganistán, como una manera de protestar”, agregó.

Escucha el análisis completo en la entrevista realizada por Julio César Rodríguez en Podría ser peor: