La Defensoría del Pueblo de Bolivia alertó este miércoles del riesgo de debilitamiento de la democracia en el país y trazó un panorama sombrío de los derechos de mujeres y niños.

A pesar del reiterado ejercicio electoral y la mayor inserción de mujeres en el estado, “se están generando condiciones que afectan la calidad de esta participación y por lo tanto de la misma democracia”, advirtió un informe anual del Defensor Rolando Villena entregado a la AFP.

Este deterioro “se refleja en la intolerancia a la opinión crítica, el debilitamiento de la independencia de las instituciones del Estado y la división y cooptación de los movimientos sociales y pueblos indígenas”, sostuvo.

“Creemos que uno de los problemas más graves para los derechos humanos en Bolivia, continúa siendo la violencia estructural, transversal y creciente que está golpeando cada vez con más dureza a las niñas, las mujeres, los niños y adolescentes”, agregó.

El Defensor arguyó que esa situación “también se evidencia contra todas las poblaciones vulnerables y en prácticamente todos los espacios de su vida”.

El informe destaca también el resultado de un estudio de la ONU que señala que Bolivia ocupa, detrás de Haití, los primeros lugares en violencia contra la mujer.

En ese sentido mencionó que en lo que corre del año se registraron 104 feminicidios, según datos del Observatorio de la Mujer, Cidem.

También cuestionó que, a abril de este año, 1.200 niños y niñas menores de seis años estuvieran viviendo en cárceles junto con sus padres que cumplen condenas.

El reporte, que aborda diversas temáticas, expresó también preocupación, porque “el 58% de los niños trabajadores en Bolivia son menores de 14 años y el 90% del trabajo infantil es informal”.

Villena entregó el informe en coincidencia con la conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos.