Blake Griffin es hoy por hoy el mejor jugador de Los Angeles Clippers en la NBA y anoche lo volvió a demostrar al guiar a su equipo a una ajustada victoria ante los Phoenix Suns.

Con 45 puntos en su cuenta personal, Griffin no solo guió la ofensiva de los Clippers, sino que también anotó la canasta ganadora con un espectacular e infartante triple al final del primer tiempo extra, permitiendo la victoria de los dirigidos por Doc Rivers.

Con 2 segundos por jugar, Griffin recibe la pelota de un saque de costado, se acomoda y lanza ante la marca. La pelota rebota en el aro, se eleva y cae dentro de la canasta desatando la locura en el Staples Center.