La victoria en la lucha contra los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) depende de los iraquíes, dijo el martes el secretario estadounidense de Defensa, Chuck Hagel, de visita inesperada a Bagdad, donde se entrevistará con las autoridades iraquíes.

Hagel prevé reunirse con los comandantes estadounidenses presentes en Irak, con su homólogo iraquí y con el primer ministro Haidar al Abadi, informó el portavoz del Pentágono John Kirby.

Se trata de la primera visita de Hagel a Irak y seguramente la última ya que en los próximos días será reemplazado por Ashton Carter al frente del Pentágono.

A su llegada, Hagel pronunció un breve discurso ante soldados estadounidenses y australianos.

Hagel afirmó que Estados Unidos y sus aliados podían ayudar a los iraquíes contra el EI, pero que en definitiva el éxito de la campaña contra los yihadistas dependía del gobierno iraquí.

“Podemos ayudar, podemos entrenar, podemos asesorar, que es lo que estamos haciendo”, pero son los iraquíes “los responsables del resultado final”, dijo Hagel.

Exhortó además a los dirigentes iraquíes a formar un gobierno de unidad, capaz de ganar la confianza de las diferentes comunidades étnicas y religiosas de Irak.

Estado Unidos forjó una alianza de países occidentales y árabes para ayudar a Irak en la lucha contra el Estados Islámico. La coalición apoya a las fuerzas iraquíes con bombardeos aéreos y entrenamiento de las tropas.

Aviones estadounidenses y de los aliados han lanzado más de 1.200 ataques aéreos contra los yihadistas en Irak y Siria desde el 8 de agosto pasado.

Estados Unidos tiene cerca de 1.500 soldados en Irak para proteger la embajada y asesorar al ejército iraquí y las fuerzas kurdas.

En noviembre, el presidente Barack Obama aprobó el despliegue de otros 1.500 soldados para reforzar la capacitación.

En total habrá hasta 3.100 efectivos en Irak para ayudar a recomponer las Fuerzas Armadas iraquíes después de la debacle sufrida frente a los combatientes del Estado Islámico en el norte y oeste del país.

Hagel llegó a Bagdad procedente de Kuwait, donde el teniente general James Terry anunció el lunes que varios países de la coalición van a enviar unos 1.500 soldados adicionales a Irak para capacitar y ayudar al ejército del país.

Terry, nombrado al frente del Comando Multinacional Interarmas (CMI), integrado por militares de más de 30 países, no precisó la nacionalidad de los efectivos.

“Estamos todavía trabajándolo. Quiero dejarles tiempo para que vuelvan a sus capitales y trabajen en los detalles”, añadió el general.

Terry señaló que las fuerzas iraquíes están mejorando, si bien les faltan meses para poder lanzar una ofensiva a gran escala contra el Estado Islámico.

Por su parte, el EI está “a la defensiva, tratando de mantener los territorios que ha ganado y todavía con capacidad de lanzar algunos ataques de alcance limitado”, dijo el general estadounidense.

El grupo extremista sunita siembra el terror con decapitaciones, violaciones y otras atrocidades en los territorios que controla en Irak y Siria, sobre los cuales proclamó en junio un califato.