La pre-eclampsia, una patología del embarazo que se caracteriza por la hipertensión arterial, está fuertemente vinculada al nacimiento de niños autistas y con retrasos en su desarrollo, según un estudio de la Universidad de California en Davis.

Los niños -cuyas madres sufrieron esta condición durante el embarazo- tienen el doble de riesgos que otros de padecer autismo, aún más si los síntomas de la madre fueron más severos, según esta investigación publicada el lunes en la revista especializada Journal of the American Medical Association, Pediatrics.

Las mujeres con pre-eclampsia tienen hipertensión arterial durante la segunda mitad de la gestación, acompañada de un aumento de los niveles de proteína en la orina y la aparición de un edema.

El estudio se realizó sobre más de 1.000 niños de dos a tres años de edad, en el marco de una investigación sobre los riesgos genéticos y del medio ambiente en el autismo en el norte de California (oeste de Estados Unidos).

“Constatamos un vínculo significativo entre la pre-eclampsia y el síndrome del autismo, así como con los retrasos en el desarrollo, que aumenta según el grado de severidad de la patología”, explicó Cheryl Walker, profesora adjunta de ginecología de la división de medicina maternal del Instituto MIND de la Universidad de California en Davis.

Las madres de niños autistas y de niños con retrasos en el desarrollo también sufren a menudo de insuficiencia placentaria respecto a aquellas cuyos niños evolucionaron normalmente.

La pre-eclampsia puede afectar el desarrollo del cerebro probablemente debido a las limitaciones de nutrientes y de oxígeno resultantes de esta patología maternal.