El Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, aseguró que la Iglesia no está en contra de una reforma educacional, pero que ésta debe tener como prioridad a la familia y asegurar la calidad en la enseñanza. Agregó que es importante que todas las personas pueden convivir en un nuevo sistema educativo para el país.
La iglesia Católica ha estado atenta a los cambios que se plantean dentro de la reforma educacional; con una postura crítica, principalmente por la orientación que -a su juicio- tiene el proyecto impulsado por la presidenta Michelle Bachelet.
Los ejes fundamentales de la reforma también han sido blanco de cuestionamientos principalmente por la figura más importante de la Iglesia en Chile, el arzobispo Ezzati, quien ha planteado su inquietud en cuanto a que se ve más un enfoque en lo económico y no en lo educativo.
En esta oportunidad, el religioso se refirió nuevamente a la reforma asegurando que es necesario que haya un compromiso por hacer que las personas puedan convivir en el sistema educativo, pensando en que la educación es un derecho para todos los integrantes de la familia.
La autoridad eclesiástica afirmó que ellos como iglesia no están en contra de una reforma, pero que están a favor de un cambio en la educación que tenga algunos puntos importantes dentro de su estructura.
Ezzati agregó que como Iglesia Católica esperan ir aportando en la construcción de una armonía para el país que incluya a todos los sectores, dejando de lado cualquier tipo de diferencia.
