Vestidos de negro y emulando un funeral, marcharon los funcionarios de los dispositivos ambulatorios de salud mental. Exigen mejoras en infraestructura y en recursos humanos, indicando que las autoridades de salud luego de 4 meses de negociaciones no han mostrado interés en sus demandas.

Cuatro dispositivos ambulatorios de Salud Mental, todos del Hospital Regional de Concepción, realizaron una intervención urbana para exigir que las autoridades de salud pongan atención a sus demandas de infraestructura y situaciones contractuales.

Los manifestantes consideran que se ha privilegiado la atención cerrada y que se ha dejado de lado el modelo comunitario, el trabajo inserto en la población y de vital importancia para la comunidad. Esto les ha generado serios problemas para trabajar, y atender correctamente a los pacientes, según acusaron.

Otra de las exigencias de este grupo de profesionales es la regularización contractual, se sienten como “funcionarios invisibles” ya que sus empleadores; por el tipo de contrato, no les pagan las imposiciones, la salud ni un seguro de cesantía.

Además aseguran vivir en la incertidumbre por la vulnerabilidad de este tipo de relación laboral.

Este “funeral”, ya que la intervención urbana apeló a la muerte de la salud psiquiátrica pública, llegó hasta el Servicio de Salud de Concepción para hacer un llamado urgente a su director Marcelo Yévenes a quien se han dirigido en varias oportunidades sin obtener respuesta satisfactoria a sus demandas.