Álex Quilodrán llevaba 13 años trabajando para Paneles Arauco, específicamente en la sección Encoladora de la Planta Horcones, cuando fue despedido tras tener una enfermedad laboral que la empresa no le reconoció, según denuncia.

Arauco se acogió al artículo 161 del Código del Trabajo, aludiendo que la desvinculación del trabajador se debía a una necesidad de la empresa.

Álex padece una epicondinitis bilateral más túnel carpiano. Esto quiere decir que tiene una alteración en la inserción de sus tendones. La epicondinitis se debe a un “esfuerzo repetitivo con los músculos”, mientras que el Túnel Carpiano causa un adormecimiento de las palmas de las manos y los dedos, la que es causada por la presión mantenida y repetitiva de la muñeca, manos y dedos.

Esta enfermedad se debe al trabajo repetitivo que Álex realizaba en sus labores diarias en la planta perteneciente a Paneles de Forestal Arauco.

“Desde la Superintendencia de Salud me confirmaron que se trataba de una enfermedad laboral. Yo a la empresa le expliqué mi problema y los médicos le explicaron que tenían que cambiarme de sección, pero no me hicieron caso”, explicó el trabajador.

Mediante 5 cartas los médicos de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) solicitaron a Arauco que se alivianara la carga laboral o bien se cambie de sección al operario, dado que el trabajo repetitivo de muñecas en la sección Encoladora de Paneles deteriora más su salud y por ende sus manos, que son lo único que tiene para sacar adelante a su familia.

Estas cartas se enviaron entre noviembre de 2010 a octubre de 2011 y fueron firmadas por el doctor Jorge Sotomayor Rojas, quien se desempeñaba como jefe del Departamento de Salud Ocupacional.

En el 2012, y sin explicación aparente, la ACHS decide cambiar su diagnóstico a uno de origen común. Ante esto, el denunciante decidió emprender una serie de trámites para revertir este cambio. Mientras se encontraba realizando estas diligencias fue despedido por Arauco.

“Finalmente ellos deciden despedirme, teniendo todos los antecedentes de mi enfermedad laboral. Yo entiendo que ellos tengan la capacidad de despedir a la gente cuando ellos quieran, pero mi caso era diferente porque yo tengo una enfermedad laboral”, dijo el trabajador.

Finalmente, Arauco lo despide aferrándose al artículo 161 del Código del Trabajo, donde se establece “que el empleador puede poner término al contrato de trabajo invocando como causal las necesidades de la empresa, establecimiento o servicio, tales como las derivadas de la racionalización o modernización de los mismos, bajas en la productividad, cambios en las condiciones del mercado o de la economía, que hagan necesaria la separación de uno o más trabajadores”.

Actualmente, Álex señala sentirse muy asustado, ya que no sabe cómo seguirá manteniendo a su familia y cree que lo más justo sería una indemnización por parte de Arauco, ya que él se encontraba sano cuando ingresó a trabajar.

“Tengo miedo, porque me duelen mucho los brazos… y tengo que mantener a mi familia (…) La empresa sabía de mi problema y me despide, encuentro que esto no es legal”.

Trabajadores de la Planta Horcones, quienes no quisieron que sus nombres fueran publicados por temor a represalias por parte de Arauco, se refirieron al caso señalando que no es la primera vez que ocurre algo de este tipo.

“Alex al tiempo de entrar a trabajar a la planta comenzó a sentir molestias a causa de los movimientos repetitivos que tenía que hacer en su área de trabajo. El problema es que Arauco no reconoció esto como una enfermedad profesional”, indicó uno de los empleados.

Además señalaron que esta práctica es habitual al interior de la compañía. “Siempre se acogen al artículo 161 para despedir a la gente. La empresa no reconoce los accidentes e incluso, para tener más horas sin accidentes, esconde a sus trabajadores. Les da días libres para no tener que ingresar los casos al ISP y que no aparezca en los registros de la planta”, explicó.

“En el 2011 uno de nuestros compañeros falleció. Él era del área de prensa y nuestros jefes nos pedían saltarnos las reglas de seguridad para producir más en menos tiempo… y estas con las consecuencias”.

Consultados por BioBioChile, Arauco señaló que Álex Quilodrán fue despedido en septiembre de 2013, en el momento que la ACHS cambia su diagnóstico a uno de origen común. Es decir, cuando no tenía una enfermedad laboral, por lo que no se trata de un despido injustificado a juicio de la empresa.

Además indicaron que el trabajador nunca fue a los controles médicos pertinentes, lo que fue tajantemente desmentido por el trabajador.

Cabe señalar que la Superintendencia de Seguridad Social solicitó un informe actualizado y detallado para estudiar el caso del denunciante.

Carolina Mardones (BBCL)

Carolina Mardones (BBCL)

Carolina Mardones (BBCL)

Carolina Mardones (BBCL)