Una voz de alerta envió la Asociación de Servicios Turísticos de la Región de Coquimbo (Asertur) a las autoridades locales, ante lo que denominan una total carencia de mesas de trabajo para coordinar efectivamente los diversos puntos a abordar para enfrentar la temporada estival que se avecina.

La agrupación reúne a más de 40 operadores turísticos de las diversas comunas de la región, quienes centraron sus críticas en la conurbación Coquimbo-La Serena, considerando que es la principal puerta de entrada a los visitantes.

Destacaron los problemas en la conectividad entre ambas ciudades, producto de los trabajos viales que se desarrollan y además pusieron énfasis en abordar la creciente aparición de los llamados “piratas”, quienes ofrecen servicios no certificados a los turistas.

“La temporada estival se nos acerca y hay una serie de aspectos que no son abordados aún por las autoridades comunales y regionales. Esto parte en el ámbito de conectividad entre Coquimbo y La Serena, la cual está en pésimo estado y juega en contra de los visitantes y una buena estadía” declaró Cristian Clavero, presidente de Asertur.

Clavero se refirió además a la temporada de cruceros y señaló que hubo una mesa de trabajo y que en ésta no fue incluido el sector privado. Y agregó que “se debe considerar un factor clave como lo es la aparición de los operadores turísticos piratas, que ya el año pasado y en otras ocasiones han producido una merma sustancial en quienes estamos establecidos de forma legal”.

Según Clavero se debe hacer algo respecto a la falta de higiene y preocupación por los lugares turísticos en Coquimbo, ya que “la higiene es un punto clave para los turistas. El sector del puerto, caletas, calles y el fuerte de Coquimbo están en pésimo estado, lo cual se ve a simple vista. Al igual que un ícono de La Serena como lo es el Faro. Para qué decir del aeropuerto que aún está en proceso de remodelación”.

La presidenta de la Cámara de Comercio local, Marviola Rivera, sostuvo que “estamos cansados de pedir mejoras para nuestra ciudad. Existe un descuido no menor de las calles, nuestros zigzags y para qué decir del borde costero. Por otro lado, están los campistas ilegales y la pésima presentación de nuestra caleta”.

“Hay otras cosas a considerar como el Barrio Inglés y el tema de la seguridad. Como comerciantes esperamos que en lo poco y nada que queda para llegar a la temporada estival en sí, se generen mejoras y compromisos al respecto de lo que mencioné”, detalló Rivera.

Por su parte, la Corporación de Turismo comunal anunció que se iniciaron mesas de trabajo para coordinar los aspectos mencionados por los dirigentes del turismo y el comercio, con la finalidad de brindar un mejor servicio a los visitantes nacionales y extranjeros.