Un agente de la fiscalía de la Ciudad de México hirió de bala a un estudiante en las inmediaciones de la Universidad Autónoma Nacional de México (UNAM), la mayor del país, tras un confuso choque con universitarios, informó el sábado la fiscalía.

El incidente se produjo este sábado a raíz de la llegada a las inmediaciones de la Facultad de Filosofía y Letras de un equipo conformado por un oficial de la fiscalía, un agente de la policía de investigación de esa dependencia y dos peritos “debidamente acreditados e identificados”, explicó la fiscalía en un comunicado.

El equipo, acompañado por un abogado de la UNAM, se había desplazado al lugar por una denuncia de robo de un celular a una estudiante del centro el pasado miércoles, detalla el texto.

Al llegar al lugar, “estos servidores públicos fueron agredidos de forma verbal y física por un grupo de aproximadamente 20 personas, quienes pretendían retenerlos”, señaló la fiscalía.

Acto seguido, “el elemento de la policía de investigación dijo haber realizado disparos al aire para evitar el ataque, resultando lesionada en el muslo izquierdo una persona de sexo masculino que se encontraba en el sitio”.

El agente se encuentra hospitalizado “en calidad de detenido”, dijo la fiscalía, que ya abrió una averiguación sobre el caso.

Según reportes de la prensa local basados en testigos, el grupo de estudiantes se extrañó de ver cómo un grupo de personas sin uniforme bajaron de un carro y empezaron a tomar fotografías de la facultad.

Al preguntarles quienes eran y qué hacían en la universidad, empezó el choque. Los universitarios lanzaron piedras contra el equipo de la fiscalía y el agente disparó contra ellos, según los periódicos.

La UNAM confirmó que, tras una discusión, el grupo de jóvenes persiguió e hirió al funcionario, que accionó su arma de fuego y lesionó a un estudiante.

“La Universidad Nacional lamenta profundamente el altercado y condena cualquier hecho de violencia independientemente de quién lo genere”, expresó en un comunicado.

El caso ha levantando un fuerte rechazo en las redes sociales coincidiendo con un momento muy sensible para México.

El país vive conmocionado e indignado por la desaparición en septiembre de 43 estudiantes de magisterio, que se teme que fueron masacrados en una alianza de narcotraficantes y policías en Iguala (sur).