La policía detuvo el miércoles a un guardia fronterizo israelí sospechoso de haber matado a un manifestante palestino en Cisjordania, en mayo pasado, indicaron fuentes policiales.
El guardia fronterizo, cuya identidad no fue revelada, fue detenido tras una investigación del servicio judicial encargado de instruir las denuncias contra la policía. Cabe mencionar que los guardias fronterizos dependen de la policía.
“Esta detención es superflua. Mi cliente desmiente haber tirado con balas reales”, dijo el abogado del guardia fronterizo, Benny Katz, en declaraciones a la radio militar.
El joven palestino Nadim Nuwara, 17 años, murió el 15 de mayo pasado en Beitunia, localidad situada a 14 km de Jerusalén, durante la manifestación de conmemoración de la Nakba (catástrofe en árabe), nombre que los palestinos dan a la creación del Estado de Israel y la tragedia de los refugiados.
El mismo día, en el curso de la misma manifestación, murió otro joven palestino de 16 años, Mohamad Udeh.
La autopsia del cuerpo de Nadim Nuwara había sido realizada por un equipo de médicos forenses integrado por dos israelíes, un palestino, un danés y un estadounidense.
“Todos coincidieron en que la víctima murió debido a balas reales”, declaró en su momento Sarit Michaeli, de la ONG israelí B’Tselem, patrocinadora de la autopsia junto a las organizaciones “Defensa de los Niños-Internacional”, Al Haq y Físicos por los Derechos Humanos.
Después de la muerte de esos dos adolescentes, el ejército israelí había afirmado en un comunicado que sus soldados habían utilizado “balas de goma”.
