Hasta 15 años de prisión arriesgan los dos funcionarios de la PDI que fueron formalizados por el delito de tráfico de drogas. Los imputados utilizaron vehículos institucionales para trasladar en al menos cuatro ocasiones los estupefacientes desde la zona norte del país hasta la Región Metropolitana.

En prisión preventiva quedaron los ahora ex subinspectores de la PDI Manuel Bustos y Luis Farías, pertenecientes a la Brigada Móvil de Santiago y Brigada de Robos de Talca respectivamente.

Según explicó el fiscal Jorge Carmona los imputados se conocieron en la unidad de la PDI de Calama. Desde ahí formaron una red de informantes y en este contexto habrían sido contactados por traficantes extranjeros.

Carmona indicó que ya destinados a otras reparticiones los imputados habrían sellado vínculos con narcotraficantes para realizar el traslado de la droga desde la zona norte del país hasta la capital.

El persecutor indicó que el último cargamento desbaratado por la policía alcanza a los 170 kilos de droga avaluada en 150 millones de pesos. Además, indicó que para no despertar sospechas los dos policías utilizaron automóviles institucionales los que por su condición no eran fiscalizados en la ruta.

De acuerdo al Ministerio Público los imputados comenzaron a ser investigados luego que no pudieran justificar el kilometraje de los vehículos que utilizaban. Además se constató que los policías bloquearon los sistemas de GPS o rastreo satelital de los automóviles.

El subprefecto Iván Villanueva, jefe de la Brigada Antinarcóticos de la PDI sostuvo que por ahora se mantiene junto a la arista judicial una investigación interna.

Junto a los oficiales de la PDI la fiscalía formalizó a la esposa de Manuel Bustos, María Salvarierra, como cómplice del delito.

Además el Ministerio Público anunció que también presentará cargos en contra de una cuarta persona, un civil, que de acuerdo a los antecedentes fue contactado por los detectives para que cumpliera la labor de chofer y en compañía de dos narcotraficantes bolivianos viajara a Talca para cargar droga y traerla a la capital.

En la investigación se indaga que los imputados entre los meses de noviembre del año pasado hasta la fecha habrían realizado otros cuatro ingresos de droga con un pago cercano a los 5 millones de pesos por cada traslado.

Los dos policías quedaron en prisión preventiva durante los 120 días de plazo de investigación. En tanto María Salvarierra quedó con arresto domiciliario nocturno.