Desde hace dos años que vecinos de Chiguayante viven los problemas que les trajo la vivienda de reconstrucción entregada por el Gobierno. La casa se gotea y está construida en un terreno mal compactado.

Antes del terremoto de 2010 que afectó a la zona, Rubén Luna y Cecilia Aguayo, tenían una vivienda sólida, sin embargo, no resistió el megasismo y se vieron obligados a postular al subsidio de reconstrucción para poder volver a tener un hogar.

El matrimonio nunca se imaginó que su nueva casa se transformaría en un problema porque desde el momento que la habitaron, las goteras, desniveles, puertas descuadradas y un terreno mal compactado se hicieron presente.

Rubén, informa que en reiteradas ocasiones han concurrido al Serviu para pedir reparaciones, pero reclaman que sólo han recibido soluciones parche. Explicó que incluso han querido conversar con el director del organismo, pero nunca han conseguido una reunión.

Lo que más atemoriza a los dueños de casa es lo que sucede bajo de la construcción, basta con cavar un par de centímetros para darse cuenta que bajo del radier hay un espacio vacío. Declaran que hace meses que les dijeron que se iba a hacer un estudio del terreno, pero aún están esperando.

El matrimonio lo único que espera es una solución definitiva que les permita vivir tranquilos. Declaran que incluso la mediagua que se les entregó les dio menos problemas que la casa entregada por las autoridades.