Un ruso enfrentaba este martes ante un tribunal estadounidense acusaciones de terrorismo después de haber estado años detenido en Afganistán por sospechas de ser un combatiente extranjero.

Irek Ilgiz Hamidullin, que fue trasladado el lunes desde Afganistán, es el primer preso extranjero en ser llevado a Estados Unidos para ser juzgado.

Autoridades estadounidenses acusan a Hamidullin de 12 delitos relacionados con actividades terroristas, incluido el de apoyar materialmente a terroristas, tentativa de destruir aviones estadounidenses y tentativa de asesinato de un ciudadano estadounidense. Puede llegar a ser condenado a cadena perpetua si es hallado culpable.

Hamidullin, quien tiene cerca de 55 años, fue capturado en 2009 y mantenido como prisionero durante cinco años en la cárcel de Parwan, cerca de Bagram, Afganistán, antes de ser trasladado a Estados Unidos.

Supuestamente condujo un ataque insurgente en 2009 contra fuerzas estadounidenses en la montañosa provincia afgana de Jost.

Era uno de los 13 extranjeros detenidos por autoridades estadounidenses en Afganistán por sospechas de luchar junto a los talibanes.