El ejército israelí demostró “un desprecio chocante” por la vida de los civiles en la Franja de Gaza durante los 50 días de guerra que devastaron al enclave palestino, entre julio y agosto, afirmó este miércoles Amnistía Internacional .

Israel rechazó las acusaciones de esta ONG, afirmando que no aportaba “ninguna prueba” y que no tenía en cuenta “los crímenes de guerra perpetrados por Hamas”, el movimiento islamista palestino que controla el enclave, y que su informe era “una herramienta de propaganda para Hamas y los otros grupos terroristas”.

Pero, esta organización de defensa de los derechos humanos con sede en Londres, por su parte, también acusa “a los grupos armados palestinos de haber cometido crímenes de guerra, al lanzar miles de cohetes hacia Israel, matando a seis civiles entre los cuales un niño”.

Entre el 8 de julio y el 26 de agosto, más de 2.100 palestinos, en su mayoría civiles, murieron durante la ofensiva israelí contra Gaza, así como más de 70 del lado israelí, en su mayoría soldados.

En su informe titulado “Familias bajo las ruinas: ataques israelíes contra casas vacías”, AI señala ocho ataques realizados por el ejército israelí contra viviendas “sin ninguna advertencia” y en los cuales murieron “al menos 104 civiles, entre los cuales 62 niños”.

“El informe destaca que en varias ocasiones los israelíes utilizaron los bombardeos aéreos para destruir casas, matando a veces a familias enteras”, señala Amnistía. Y, si bien en algunos casos el blanco eran objetivos militares, “la devastación ocasionada entre los civiles fue claramente desproporcionada”.

AI acusa a Israel de haber tomado, a veces, “directa y deliberadamente como blanco a civiles o edificios civiles, lo que podría constituir crímenes de guerra”.

Para Philipp Luther, director del programa para Oriente Medio y África del Norte de Amnistía Internacional, las conclusiones del informe dejan en claro que las fuerzas israelíes demostraron “un desprecio chocante por la vida de los civiles palestinos que no tenían ninguna chance de huir” del enclave bajo el bloqueo de Israel.

La ONG explica, en la presentación de su informe, que las autoridades israelíes no le permitieron acceder a la Franja de Gaza, forzándola a realizar “sus investigaciones desde lejos, con la única ayuda de dos trabajadores con base” en el enclave.

Además, Amnistía llama a las autoridades israelíes y palestinas à “permitir a la Corte Penal Internacional que investigue los crímenes cometidos en Israel y en los territorios palestinos ocupados”.

Finalmente, AI solicita a Israel que coopere con el Comité de Derechos Humanos de la ONU, que demanda a este país que abra una investigación independiente e imparcial sobre la guerra en Gaza.

Relaciones Exteriores de Israel denunció este informe, acusando a Amnistía Internacional de haber ignorado “los crímenes de Hamas, entre ellos la utilización de escudos humanos” y los lanzamientos de cohetes “desde escuelas, hospitales y mezquitas”.