Una de las pocas certezas que tenemos en la vida es que vamos a morir. Si luego de eso hay cielo, infierno, reencarnación o nada, es otra historia. La vida o eso que llamamos alma, abandona nuestro cuerpo y ¿qué sigue?

El portal de noticias BBC Mundo intentó dar respuesta a ello, explicando lo que le ocurre a nuestro cuerpo cuando dejamos esta vida.

1.- Rigor Mortis: El corazón deja de latir y la sangre deja de circular, por lo que se espesa y se coagula. El cuerpo comienza a perder temperatura y los músculos se endurecen, esto es conocido como rigor mortis. “Este proceso suele iniciarse después de 4 ó 6 horas, primero en los músculos más pequeños como los de los párpados o la mandíbula, luego le sigue el cuello, y más tarde los músculos más grandes como los brazos o las piernas”, explicó Carla Valentine, curadora técnica del Museo de Patología Barts de Londres.

2.- Las bacterias: Como las células muertas se empiezan a romper y a liberar sustancias, se crea un ambiente ideal para bacterias y hongos, por lo que el cuerpo se comienza a descomponer. Durante este proceso, las bacterias despiden derivados químicos, entre los que destacan la putrescina y la cadaverina, ambas de un olor muy desagradable. Valentine explica que este proceso puede tardar dependiendo de numerosos factores, por ejemplo “la regla básica es que, bajo tierra, el cuerpo tarde ocho veces más en descomponerse que fuera de ella”. Sin embargo, si el cuerpo se encuentra en un ambiente seco como el desierto, esto podría no ocurrir, ya que el cuerpo se momifica.

3.- El cuerpo se deshidrata: La directora de funerarias de la organización “La Orden de la Buena Muerte”, Caitlin Doughty, explicó que por miles de años la gente creyó que el pelo y las uñas seguían creciendo, “porque esa era la impresión que daban los muertos. En realidad, no crecen: da esa sensación porque el resto del cuerpo se encoge”. El cuerpo se deshidrata, por lo que la piel que rodea las uñas se retrae y hace que se vea largas.