En prisión preventiva quedó el joven de 24 años detenido la tarde del miércoles, horas después del atentado que sufrió el cuartel del Labocar en Temuco. Sin embargo, la Fiscalía no vinculó al imputado con el bombazo.

Luego que Carabineros y el GOPE allanaran la vivienda del joven, se encontraron elementos para fabricar artefactos explosivos. Alambres, pilas y pólvora fueron los materiales que los uniformados hallaron en el hogar.

Este jueves se confirmó que en el dormitorio de Morales se encontró 118 gramos de pólvora industrial, una batería y cables.

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La situación del joven ha causado confusión en una de sus compañeras de casa, quien señaló que le llamó la atención los argumentos que utilizó la Fiscalía para imputarle los cargos al joven y que fue resuelto por la jueza de Garantía, Luz Mónica Arancibia, para aplicar la prisión preventiva como medida cautelar.

Al momento de definir la medida cautelar, se argumentó que Morales es un peligro para la seguridad de la sociedad y la eventual inducción de los testigos que podría generar la libertad del imputado. Según se indicó, la jueza invocó el “conflicto mapuche” como argumento para aplicar esta medida cautelar, pese a que nadie en la audiencia lo mencionó.

El abogado Marcelo Pizarro, de la Defensoría Penal Pública, anticipó que apelarán a la prisión preventiva y no descartó recurrir a un recurso de amparo para su representado.

Hay que aclarar que la investigación que se inició respecto de Francisco Morales es contra la Ley de Armas y Explosivos, por haber sido sorprendido en poder de elementos para fabricar explosivos, sin relación con el atentado que afectó al Labocar de Carabineros, ya que no fue posible establecer un vínculo concreto.