La jornada de este sábado, la Confederación de Padres y Apoderados, Confepa, realizó una nueva y masiva marcha “nacional de los papás”, para expresar su descontento por el futuro de los miles estudiantes que se verían afectados por la reforma educacional del Gobierno.

La manifestación, que según la Confepa reunió a más de 120 mil personas de distintas ciudades del país, se inició a eso de las 11:00 horas y se desarrolló entre Plaza Italia y Plaza Los Héroes, pasando frente a La Moneda.

Recordemos que estas marchas se realizan para dejar en claro el desconcierto que tienen los padres y apoderados debido a la forma en que está planteada la reforma, que según han señalado, obligaría a cerrar más de 4 mil colegios particulares subvencionados, o en el ‘mejor’ de los casos, se convertirían en particulares pagados que, sin embargo, ellos no podrían pagar.

“Por favor escúchennos, piensen en nuestros hijos. Lo único que nosotros le pedimos es que no condicionen la subvención de nuestros hijos por la personalidad jurídica de los colegios. Busquen fiscalizar, busquen regular, busquen generar todas las instancias que aseguren que no hayan abusos, pero no a costa de nuestros hijos”, afirmó la presidenta de la Confepa, Erika Muñoz.

“Estamos en contra de la reforma, y creo que se va a caer nuevamente así como quisieron copiar el Transantiago de otros países y la reforma procesal penal (…) Nosotros como apoderados somos los primeros fiscalizadores de cada uno de los sostenedores, y como tal estamos para defender al sostenedor, al colegio, y primero que todo, a nuestros niños”, afirmaron algunos apoderados que marchaban.

El diputado Felipe Kast asistió a la marcha junto a su familia, y aseguró que la movilización demuestra el sentimiento de gran parte de la población nacional.

“En la Cámara los que mandaron fueron los del Partido Comunista. Yo espero que en el Senado manden también la Democracia Cristiana, Renovación Nacional, Evópoli, Amplitud y el PPD (…) Y ojalá que no solamente manden los partidos políticos, que escuchen a estos miles de apoderados que han salido a la calle y que no lo habían hecho antes”, dijo.

Mientras tanto el diputado y timonel UDI, Ernesto Silva, afirmó que respaldarán a los padres y apoderados frente a la reforma que, según dejó entrever, estaría vulnerando a la clase media.

“Le queremos decir a los papás que no se sientan solos, por eso los venimos a acompañar. Por más que Michelle Bachelet quiera hacer una reforma que cierra los colegios y afecta a la clase media, ellos no están solos y los vamos a acompañar. Yo creo que la fuerza de esta marcha donde no hay violencia ni encapuchados, es el ejemplo de como la oposición social le va a doblar la mano a esta mala reforma”, aseguró.

El pasado 10 de octubre la Confepa ya había realizado una marcha nacional en distintas regiones del país, la cual también reunió unas 100 mil personas, pero como suma total de todas las ciudades que participaron en la instancia, por lo que se podría apuntar a que la instancia de hoy es la que ha tenido una convocatoria más alta desde que se iniciaron las movilizaciones de esta agrupación.

Respuesta del Gobierno

Desde el Gobierno no se hicieron mayores comentarios en torno a esta movilización, más allá de reconocer la legitimidad del derecho a manifestarse y la confianza en el carácter pacífico de la marcha.

“No he recibido los detalles de la marcha, pero me imagino y espero se desarrolla en tranquilidad como corresponde a una marcha pacifica que ha sido convocada por los organizadores”, indicó el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo.

Mientras tanto desde la Intendencia Metropolitana destacaron que la manifestación contó con autorización en todo momento, desmintiendo así informaciones aparecidas en redes sociales sobre la negativa del Gobierno a la realización de la instancia.

“La marcha de la Confepa siempre ha contado con autorización, al igual que todas las marchas realizadas en los últimos siete meses. La información que tenemos es que se desarrolla en forma pacífica (…) Nosotros como Gobierno les garantizamos el derecho a expresarse libremente”, sentenció el intendente Claudio Orrego.