El presidente estadounidense Barack Obama consideró el jueves que sería contraproducente ordenar el cierre de fronteras para personas que provengan de países africanos foco de la epidemia de ébola.

“No tengo una objeción filosófica a una prohibición de los viajes, pero todas las conversaciones con expertos muestran que esto sería menos eficaz que las medidas” de control en los aeropuertos, declaró Obama a la salida de una reunión con el equipo encargado de organizar la respuesta a la epidemia realizada en el salón Oval.

El presidente de la Cámara de Representantes y otros legisladores estadounidenses pidieron este miércoles al gobierno de Obama cerrar el territorio del país a las personas originarias de los tres países africanos más afectados por la epidemia de ébola: Liberia, Sierra Leona y Guinea.