Altos funcionarios estadounidenses se reunieron estos últimos días con líderes kurdos del Partido de la Unión Democrática (PYD), que es la rama siria del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), bestia negra de Ankara, indicó el jueves el departamento de Estado.

En el marco de la estrategia de Estados Unidos contra el grupo Estado Islámico (EI) en Siria, estos “contactos directos” entre funcionarios del departamento de Estado y el PYD se mantuvieron “fuera de la región”, dijo la portavoz de la diplomacia norteamericana, Jennifer Psaki.

El PYD, que Ankara sospecha tiene estrechos lazos con los rebeldes kurdos en Turquía, posee una milicia armada denominada ‘unidades de protección del pueblo’, que defiende ferozmente la ciudad kurda de Kobane contra los asaltos del EI.

Para apoyar a los combatientes kurdos, Estados Unidos realizó más de un centenar de ataques aéreos contra los yihadistas cerca de esta localidad del norte de Siria desde finales de septiembre.

Pero Washington no está “todavía” en estado de armar y formar milicias kurdas, explicó este jueves Psaki. “Se trata unicamente de un breve encuentro” entre el PYD y el representante estadounidense, enfatizó.