Con la ausencia de la anticipada visita del Ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, a la ciudad de Osorno, se realizó la ceremonia que puso fin a la esperada firma de convenio que considera la entrega de 2 mil millones de pesos obtenidos a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) a la Municipalidad de Osorno, para dar paso a la ejecución de dos iniciativas que están dentro de la primera etapa del Plan de Descontaminación Ambiental, que son el programa de recambio de calefactores a leña y el programa de educación ambiental.

La instancia estuvo encabezada por el representante del Ministerio de Medio Ambiente, el encargado nacional de calidad del aire, Sebastián Tolvett; el Seremi de Medio Ambiente Los Lagos, Jorge Pasminio; el Intendente de la región de Los Lagos, Nofal Abud, y el alcalde de Osorno, Jaime Bertín.

De la firma, sólo mil 500 millones de pesos se destinarán para el programa de recambio de calefactores que beneficiará a 3 mil 600 familias en un plazo de tres años, mientras que los 500 millones de pesos restantes irán a financiar el programa de educación para la implementación de buenas prácticas ambientales con foco en la contaminación ambiental.

Al respecto se refirió el encargado nacional de calidad del aire, Sebastián Tolvett, quien señaló que la gente podrá optar a calefactores certificados, en un plazo de tres años.

De igual modo, explicó que a través de la seremía de Medio Ambiente se efectuara un llamado a la población para postular al programa de recambio de calefactores, y que apunta a personas de bajos recursos.

En relación al copago que tendrán que efectuar las personas seleccionadas del programa de recambio de calefactores, Sebastián Tolvett dijo que se está definiendo y no tendría que variar más allá de un 10 a 30%, sin embargo, apuntó que hay señales que dicho copago será provisto por la municipalidad de Osorno.

Referente al accionar de las alertas sanitarias ambientales, que muchas veces desconcertó a los osorninos por la falta de coordinación comunicacional, puesto que en más de alguna ocasión no se comunicaron con 24 horas de anticipación, considerando que las autoridades regionales de salud sanitaria enfatizaron desde un principio que su accionar sería de inmediato.

Precisamente, el encargado nacional de calidad del aire afirmó que efectivamente existieron problemas de comunicación.

Finalmente, Sebastián Tolvett puntualizó que el proceso de las alertas sanitarias ambientales tuvo dos efectos relevantes, primero, que logró una concientización de la población del problema ambiental, y segundo, el efecto en sí de las alertas de que la población acate las medidas, y según los análisis, la ciudad de Osorno alcanzó un nivel de concientización del problema ambiental.