Doce personas murieron en un enfrentamiento armado entre rebeldes chiitas y combatientes de Al Qaeda en el centro de Yemen, informó el miércoles una fuente de seguridad, después de que la red extremista sunita prometiera no dar tregua a los insurgentes.
El enfrentamiento estalló el martes por la noche en Radah, en la provincia de Baida, a 130 km al sudeste de Saná, cuando los chiitas intentaban avanzar para conquistar territorrios de la zona, añadió.
“Miembros de Al Qaeda intervinieron” para detener la progresión de los rebeldes, declaró la fuente de seguridad. “Seis miembros de Al Qaeda, cinco huthis (chiitas) y un civil murieron en el enfrentamiento”, añadió.
Este balance ha sido confirmado a la AFP por una fuente tribal que afirma que los combatientes de Al Qaeda han “hecho estallar la residencia de un huthi en Radah”.
Radah es una localidad fronteriza con la provincia aledaña de Dhamar, con gran presencia de zaiditas, una rama del chiismo al que afirman pertenecer los rebeldes de Ansarualá.
Estos rebeldes, cuyo feudo es Saada, en el norte de Yemen, han lanzado en los últimos meses una ofensiva fulgurante que les ha permitido apoderarse temporalmente de la provincia de Amran, y de conquistar la capital, Saná. El martes pasado también se hicieron con el control de la ciudad estratégica de Hodeida, en el mar Rojo.
Al Qaeda está activa en Yemen, sobre todo en el sur y el sudeste del país. La red extremista suele atacar a las fuerzas de seguridad y al ejército, pero recientemente ha intensificado sus operaciones contra los rebeldes
