El presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Sindicato de Pescadores de Ventanas, Sergio Silva, llamó a decir la verdad con respecto de las cifras de petróleo vertido al mar en la Bahía de Quintero, el que no ha dejado de causar daños. Sumado al perjuicio que ya provocó en el área de manejo de la zona, denunció que a poco más de dos semanas de ocurrido el incidente siguen llegando trazas del combustible a la costa.
El dirigente reveló que, según fuentes cercanas a la Empresa Nacional de Petróleo y con experiencia en el área que no identificó, los litros vertidos al mar superarían los 60.000, lejos de los 22.000 informados por la estatal. Lo anterior, considerando que sólo el flexible de 200 metros contenía 26.000 litros, a lo que se añaden los metros cúbicos derramados antes del cierre de válvulas.
Por su parte José Miguel Puerto, del Movimiento Independiente de Pescadores de Quintero que agrupa a más de 600 trabajadores del rubro, endosó la responsabilidad total de este derrame a ENAP e hizo un llamado a que se entreguen soluciones a esta situación que calificó de muy grave.
La Fiscalía Marítima trabaja para determinar las cifras exactas del derrame y el daño real ocasionado por éste, informe que estaría por concluir ya que cuenta con un plazo para su finalización de 20 días hábiles tras ocurrida la emergencia del 24 de septiembre. debería estar por concluir, puesto que tiene un plazo de 20 días hábiles tras ocurrida la emergencia, lo que podría dar más claridad con respecto a cifras oficiales del incidente y si se acercan a las estimaciones que ya manejan pescadores.
En relación a los causantes de este derrame, la Fiscalía Regional persigue la responsabilidad penal para quienes resulten responsables del procedimiento que permitió el vertimiento de combustible al mar; investigación que tiene un plazo máximo de seis meses y una sanción que puede llegar a las 3.000 UTM ($127.293.000) mil Unidades Tributarias mensuales (UTM), es decir más de 127 millones de pesos, para quien resulte sindicado como responsable.
