¿Cuánto es lo que un ser humano puede soportar? ¿Cuál es el límite que tiene nuestro cuerpo? Esas son algunas de las preguntas que más de alguna vez nos hemos hecho. Sin duda no somos indestructibles, pero te sorprenderás cuando te enteres que podemos más de lo que pensamos.

¿Podrías soportar desnudo una tormenta de nieve o recordar la serie completa del número Pi? Muchos dirán que no, pero como decíamos, nuestro cuerpo y nuestra mente puede llegar a realizar logros increíbles.

Si no lo crees, te detallamos a continuación una serie de 5 situaciones en las que nuestro cuerpo ha demostrado ser más de lo que parece. La lista, elaborada por la revista masculina Men’s Health, muestra cómo somo capaces de muchas cosas con sólo enfocarnos en ella.

1 – Tu mente puede mantener el cuerpo caliente aún en temperaturas bajo cero

Un grupo de monjes tibetanos asegura ser capaz de secar hojas húmedas en temperaturas bajo cero. Para confirmar esto, un equipo de investigadores -dirigidos por María Kozhevnikov, del Departamento de Psicología de la Universidad Nacional de Singapur- recogió datos durante una ceremonia que tuvo lugar en el Tíbet, en donde un grupo de monjes efectivamente consiguió elevar su temperatura corporal, meditando en medio de una condiciones climatológicas extremas (-25 Cº), y marcando hasta 38.3 Cº.

Posteriormente, se realizó la prueba con participantes occidentales, a quienes se les enseñó una técnica de respiración afín, logrando también aumentar su temperatura corporal dentro de unos límites. Todo esto fue conseguido gracias a que los participantes trajeron a sí imágenes mentales de llamas en su espalda, lo que generó un proceso de producción de calor, también llamado “termogénesis”.

2 – Tus articulaciones pueden predecir el clima

Por años, ancianos han dicho que cuando duele la rodilla o la cadera, es porque una tormenta se avecina. Aun cuando esta creencia es debatida, lo cierto es que hay estudios que podrían dar razón a ello. Entre ellos el llevado adelante por la Universidad de Tufts que observó que por cada 10 grados que la temperatura bajaba, mayor era la cantidad de personas que reportaban algún dolor en la rodilla.

Lo anterior, explicó el estudio, respondería a que la presión barométrica ayuda a estabilizar y movilizar la articulación de la cadera, por lo que un cambio en ésta, significaría un cambio en a otra. Asimismo, se indicó que una caída en la temperatura podría alterar el espesor del líquido sinovial, encargado de mantener las articulaciones lubricadas. De ahí entonces los dolores.

3 – Podemos levantar vehículos y objetos pesados

David Pearson, profesor de Fisiología del Ejercicio y director del Laboratorio de Investigación de Fuerza de la Ball State University, ha estudiado casos en que hombres han sobrepasado el límite de lo pensado, como la de un bombero en Estados Unidos que fue capaz de levantar un vehículo para salvar a un conductor atrapado debajo.

Según dice, en una situación común de uso de fuerza, nuestro cerebro inhibe cierto potencial con el fin de evitar posibles lesiones. Sin embargo, en situaciones de estrés, el límite que es liberado y suplido con hiper-excitación, lo que genera que algunos presenten una “fuerza sobrehumana”. Test en laboratorios no han conseguido recrear escenas similares de presión, sin embargo rara vez ha habido alguna afectación en los participantes.

4 – Tu cerebro puede recordar lo que sea

Cada vez más se dice que la “memoria fotográfica” es un mito, sin embargo científicos creen posible que una persona promedio puede lograr una técnica de memoria especial con sólo ser entrenado. De hecho eso fue lo que hizo el periodista y escritor Joshua Foer, que en 2006 se entrenó durante un año en trucos de mnemotécnica.

Cuento corto: en cuanto concurso de memoria que se presentó, ganó, y además logró un récord por memorizar una serie de cartas barajadas rápidamente. Hoy cuenta con un libro donde enseña algunas de las técnicas que aprendió.

5 – Tu corazón puede predecir el futuro

Un estudio publicado en 2012 por la revista Frontiers of Perception Science demostró que el cuerpo humano sabe cuando algo emocionante va a ocurrir. Para ello, se realizaron 26 pruebas distintas, en las que a los participantes se les mostró una serie de imágenes, de las cuales unas eran neutras y otras debían estimular el sistema nervioso.

Leyendo la reacciones de los participantes -como la dilatación de las pupilas, el ritmo cardíaco, circulación de la sangre y la actividad cerebral- los investigadores notaron que los sujetos presentían la aparición de algo emocionante unos 10 segundos antes de que realmente sucediera.

El equipo, que incluyó científicos de Estados Unidos y de Italia, no logró explicar el porqué de esta situación.