En las relaciones de largo plazo, la actividad sexual sufre fluctuaciones y muchas veces enfrenta problemas. Así lo afirma la psicoterapeuta estadounidense especializada en terapia sexual, Vanessa Marin, quien asegura que por lo mismo, es importante hablar claro desde el principio.

“La vida sexual de cada pareja, inevitablemente, fluye y refluye, pero mi experiencia me dice que las parejas que se toman el tiempo para hablar sobre sexo antes de casarse son mucho más exitosas que los que no lo hacen”, explica la especialista en una columna en el sitio especializado Psychology Today.

Por ella, la experta sugiere “programar un tiempo para sentarse y hacerse el uno al otro algunas preguntas importantes sobre su relación sexual”.

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“Hablar de sexo casi siempre enferma de los nervios, así que trata de establecer un entorno relajante: Pon algunas velas, algo de música, y dos vasos de vino. Antes de entrar de lleno en las preguntas, toma un momento para reconocer cualquier ansiedad o aprehensión, y agradece de antemano la voluntad del otro de ser honesto”, añade.

1. ¿Cuáles son nuestras fortalezas y debilidades sexuales?

Marin dice que “si te sientes nervioso de tener una conversación sobre sexo, una buena manera de empezar es hablando acerca de sus recuerdos sexuales favoritos. ¿Cuál es el mejor sexo que has tenido? ¿Qué hacen los dos particularmente bien juntos? Entonces, considera las posibles áreas para mejorar”.

Asimismo, la profesional llama a “tener en cuenta que el sexo es algo que siempre se puede mejorar y en que nunca se llega a un punto en que no hay nada nuevo que aprender”, además dice que “que la discusión no debe ser como una crítica, sino que como una oportunidad para identificar maneras para que ustedes dos trabajen en la mejora juntos”, por ejemplo, pueden proponerse destinar más tiempo al juego previo.

2. ¿Cómo podemos hacer que la intimidad sea una prioridad?

“Esta es una de las primeras preguntas que le hago a mis nuevos pacientes y siempre responden con miradas que parecen traducirse en ‘no sabíamos que teníamos que hacer eso’”, dice la especialista.

Y es que tener relaciones sexuales fantásticas requiere esfuerzo, asegura Vanessa, añadiendo que debes “tomar medidas activas para hacer el tiempo y el espacio para la intimidad. Las posibilidades podrían incluir la programación de citas nocturnas regulares, conseguir una niñera constantemente, o darse una escapada romántica”, explica.

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3. ¿Cómo crees que nuestra vida sexual va a cambiar a través de los años?

“Van a pasar por muchas cosas juntos, incluyendo la posibilidad de tener hijos, cambiarse de casa, cambiar de trabajo, perder seres queridos, o pasar por la menopausia. Todos estos cambios podrían tener un impacto significativo en tu vida sexual. No te puedes anticipar a cada cambio, por supuesto, pero es importante hablar de cómo puedes ser proactivo para proteger tu vida sexual cuando se producen estos hitos”, reflexiona la profesional.

4. ¿Cómo vamos a mantener viva la chispa?

Marin recuerda que es probable que una pareja de casados tenga relaciones sexuales durante décadas, y por lo mismo “puede resultar aburrido bastante rápido si lo haces de la misma manera todas las veces”.

“Habla acerca de las cosas que te gustaría probar, y qué fantasías sexuales e intereses con los que se sientan cómodos pueden experimentar. Tengo pacientes que hacen listas clasificando fantasías en rojas, amarillas y verdes. Las rojas son las cosas que sabes que no quieres tratar; las amarillas son las que dudas y las verdes son las que te acomodan. Hacer estas listas puede ser una forma divertida de mantener la química”, apunta.

5. ¿Qué haremos cuando nos peleemos por el sexo?

Vanessa dice que es inevitable que alguna vez se peleen por un asunto sexual. “Tener un plan de acción de antemano podría hacer este tipo de conflictos más manejables. ¿Tiene estrategias de comunicación con las que ya sabes trabajar para tu relación? ¿Conoces un terapeuta sexual o un consejero matrimonial a quien puedas llamar?”, plantea.

6. ¿Cómo puede cada uno seguir alimentando la relación con su propia sexualidad?

“Puedes estar casado, pero todavía tienes tu propia relación con tu cuerpo y tus deseos sexuales. ¿Qué puede hacer cada uno de ustedes para mantener eso? Los ejemplos pueden incluir hacer ejercicio, tomar un día a la semana para ti solo, masturbarte, encontrar formas de minimizar el estrés , o ir a una terapia sexual individual”, señala Marin.

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7. ¿Cuáles son nuestros deseos para nuestra luna de miel?

La terapeuta indica que “muchas parejas van a la luna de miel con enormes expectativas, pero la realidad es que casi la mitad de las parejas están demasiado cansadas incluso ​​para tener sexo en su noche de bodas”.

Por lo mismo, recomienda tener expectativas realistas, y discutir sobre lo que sientes que es importante. “¿Quieres dar prioridad al sexo sobre tus otras actividades en la luna de miel? ¿Quieres experimentar con algo nuevo (posiciones, juguetes, o ropa interior), o les gustaría tener, sexo íntimo y romántico?”

“Esperemos que esta experiencia les ayude a darse cuenta de que las conversaciones sobre sexo son una parte importante de cualquier relación sana”, concluye la experta.