Una visión compartida sobre la capacidad que deberá poseer el recinto que se proyecta construir a partir del 2016, sostienen tanto el edil lebulense como los trabajadores de la salud de la comuna. La idea es que el nuevo hospital Santa Isabel de Lebu “no sea una normalización del que ya existe, sino uno distinto con capacidades superiores y que se proyecte en el tiempo” afirmó el alcalde , Cristian Peña.

En esta misma línea se manifestó, Guillermo Fierro, coordinador de la Fenats en la Provincia de Arauco, quien hizo hincapié en que este nuevo hospital debe tener la capacidad de liberar la sobrecarga que ya presentan, los recientemente inaugurados centros de Curanilahue y Cañete, evitando también traslado de pacientes hacia el Hospital Regional en Concepción.

“Hoy día todo lo cardiológico se debe derivar a Concepción y con modelo de Telemedicina como el del Hospital Higueras, eso no sería necesario. Esa sería una solución inteligente, pues si se escala a otras especialidades, no es necesario intentar convencer y contratar a profesionales para que se vengan a la Provincia, algo que es muy difícil sin incentivos económicos mayores”, recalcó.

El alcalde Cristian Peña concuerda con el dirigente de la Fenats, y asegura que la idea es incorporar la experiencia de los hospitales de Cañete y Curanilahue.

Ambas partes concuerdan además en que el nuevo centro de salud debe contar con hemodiálisis, telemedicina, infraestructura para cirugías y un resonador magnético, algo que ya se está conversando con las autoridades del Servicio de Salud de Arauco; además de pediatría y ginecología.

Para el alcalde, en este tipo de iniciativas resulta vital el socializar los detalles de proyecto y sobre todo, considerar la opinión de quienes más conocen el sistema de salud, los trabajadores.

En tanto, el municipio que ya comprometió los terrenos para el emplazamiento del nuevo hospital, anunció que están los recursos para la contratación de profesionales con el fin de modificar el plano regulador de la ciudad. Esto, con la intención de reconocer la zona destinada al recinto, como parte del radio urbano.