El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, exigió el viernes en la ONU el fin de la ocupación israelí y denunció su “guerra de genocidio” en Gaza, en un discurso muy aplaudido ante la Asamblea General de la organización.

“Ya es hora de poner fin a la ocupación” de los territorios palestinos, afirmó Abas en el plenario de líderes mundiales reunidos en Nueva York, recordando que años de negociaciones entre las partes no han logrado un acuerdo de paz.

Abas inició su discurso denunciando que Israel eligió 2014 como un año para “hacer una nueva guerra de genocidio contra el pueblo palestino” en la franja de Gaza, con “una serie de absolutos crímenes de guerra perpetrados antes los ojos y los oídos del mundo entero”.

“No olvidaremos, no perdonaremos y no permitiremos que criminales de guerra escapen al castigo”, afirmó el líder palestino en referencia al conflicto que tuvo lugar entre julio y agosto pasados y dejó unos 2.000 muertos palestinos y 70 del lado israelí.

“La hora de la independencia del Estado de Palestina ha llegado”, señaló Abas desde el mismo estrado en el que anunció en 2011 la histórica demanda de adhesión a la ONU, en la cual tiene estatuto de país observador no miembro desde 2012.

El pedido de reconocimiento de un Estado palestino toma en cuenta la base de las fronteras anteriores a la Guerra de los Seis Días de 1967, e incluye Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén como capital.

Abas no mencionó un calendario preciso para nuevas negociaciones de paz entre las partes, exigiendo en cambio al Consejo de Seguridad una resolución que no tiene posibilidades de ser aprobada por la amenaza de veto de Estados Unidos.

Los palestinos han amenazado con recurrir a la justicia internacional para iniciar acciones legales contra Israel, aunque Abas no hizo ninguna alusión directa a esta cuestión.

Palestinos e israelíes acordaron el martes reanudar tratativas a finales de octubre en El Cairo para una tregua duradera en la franja de Gaza.

Ambas partes habían llegado el 26 de agosto a un alto el fuego que puso fin a su tercer conflicto en seis años en la franja de Gaza y se habían comprometido a volver a reunirse un mes después.

Este nuevo aplazamiento hasta finales de octubre era previsible a causa de las fiestas religiosas musulmanas y judías de estos días.