El gobierno de México anunció un programa de reactivación económica para el balneario de Cabo San Lucas (noroeste), devastado por el huracán Odile, para alistarlo para la próxima temporada turística de invierno, informó el domingo Claudia Ruiz Massieu, secretaria de Turismo.

Una vez terminada la alerta por la emergencia, el gobierno desplegará una serie de beneficios fiscales y préstamos al sector hotelero y de servicios esa zona de la península de Baja California Sur para reactivar la economía de este importante centro turístico mexicano, dijo la funcionaria en una conferencia de prensa en la que hizo un balance de daños.

Odile golpeó el domingo pasado por la noche con la fuerza de un huracán categoría 3 – de las 5 en la escala Saffir Simpson – el extremo sur de la península de Baja California, dejando cuatro muertos y graves daños materiales, especialmente en el balneario de Cabo San Lucas.

La amenaza de tormenta tropical Polo, que el sábado estuvo a 145 km de Cabo San Lucas, se alejaba el domingo debilitada, a 200 km de la costa, según datos de la Comisión Nacional del Agua.

Aunque casi la totalidad de los hoteles que se encuentran en la zona costera sufrieron algún daño, estas afectaciones no son estructurales, sino de vidriería, cancelería, mobiliarios y jardinería, añadió Ruiz Massieu.

“Ese destino estará en condiciones de recibir a los turistas en la temporada de invierno” que inicia en diciembre, indicó la ministra, que coordina las labores de reconstrucción.

Una serie de estímulos fiscales para el sector hotelero y de servicios han sido anunciados por el gobierno, así como prestamos de hasta 500 millones de pesos (casi 38 millones de dólares) para los grandes empresarios, y dos millones de pesos (151.000 dólares) para los microempresarios, que serán expedidos por el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomex), precisó de su lado en la conferencia Ildefonso Guajardo, secretario de Economía.

Unos 26.898 turistas, la mayoría extranjeros, fueron evacuados a través de un puente aéreo establecido desde el lunes hacia otras ciudades mexicanas en 234 vuelos gratuitos con aviones militares y comerciales, añadió Ruiz Massieu.

Hasta este domingo muchas zonas del centro turístico permanecían sin luz, agua, casi sin comida, con los centros comerciales cerrados y sin dinero porque los bancos y cajeros estaban inhabilitados.

El secretario de Economía aseguró que a partir del lunes empezarán a funcionar seis tiendas de autoservicio y algunos bancos.