En manos del fiscal regional sur, Raúl Guzmán, ya se encuentran los peritajes de ADN realizados por el Laboratorio de Criminalística de Carabineros de las muestras que tomaron en los sendos atentados registrados en el Metro de Santiago, en la estación Los Dominicos y en el SubCentro de Escuela Militar.

Fuentes exclusivas de Radio Bío Bío confirmaron que las muestras ratifican la presencia de dos de los tres detenidos en los ataques explosivos. Se trata de Juan Flores Riquelme, Natalie Casanova Muñoz y Guillermo Durán, quienes habrían estado vinculados a la explosión en un vagón en la estación Los Dominicos y en el atentado que dejó 14 heridos en el Sub Centro en Las Condes.

Según las pericias, se tiene información fidedigna de la participación en los hechos de Riquelme y Casanova. Sin embargo aún se investiga la participación de Durán, quien es sindicado de la detonación de un artefacto en las cercanías de una comisaría en El Bosque ocurrida el 11 de agosto.

Respecto de este último, aún no hay certezas de su situación procesal, lo que será determinado por la Fiscalía Sur cuando sea formalizado el próximo martes, junto al resto de los inculpados en el 15 Juzgado de Garantía de Santiago, a eso de las 13:00 horas.

Además de Durán, la policía tendría identificados a otros dos sospechosos de participar en el ataque registrado en las cercanía del cuartel policial. Según las fuentes de La Radio, ambos se mantienen prófugos debido a las filtraciones antes del gran operativo realizado el pasado 18 de septiembre que permitió la detención de los otros inculpados.

Las muestras orgánicas de los detenidos se tomaron desde la mochila donde iba el artefacto explosivo que fue dejado en un vagón del Metro en la estación Los Dominicos, y también otras evidencias descubiertas en el basurero del Sub Centro en la estación Escuela Militar.

Según apuntan desde el Ministerio Público, las “contundentes” evidencias son la “lápida” para ratificar la presunta participación de los detenidos en los atentados.

Estas evidencias se suman a las ya recopiladas por la policía, como lo son las imágenes del Metro y la primera comisaría de Carabineros, que también fue blanco de atentados.

Es entonces que a Flores se le acusa por tres atentados explosivos -los dos ataques en el tren subterráneo y en las cercanías de la comisaría de El Bosque-, mientras que Casanova enfrentaría cargos por el atentado en la estación Los Dominicos.

Además de los videos captados por cámaras de seguridad en los lugares afectados, se suma la tarjeta BIP utilizada por Flores en su recorrido por el Metro y el Transantiago, y además los componentes de los artefactos explosivos en especial los relojes utilizados que corresponden al mismo modelo y que habrían sido comprados en una misma tienda.