Una bochornosa situación se generó en el Juzgado de Garantía de Concepción, al coincidir la presentación de una querella del municipio penquista por los incidentes ocurridos ayer en el liceo Enrique Molina Garmendia, con la formalización de dos estudiantes detenidos durante los incidentes.

El alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz, llegó al Juzgado de Garantía penquista acompañado de dos concejales, la asesora jurídica, el director del DAEM y el rector del liceo Enrique Molina Garmendia, para presentar la querella contra quienes resulten responsables por los daños registrados en el recinto y por los incidentes en general, en que se alteró el orden público.

El rector Ricardo Morales insistió en que hubo elementos infiltrados en la manifestación, que partió con la toma del liceo, y que además se analizan sanciones para los estudiantes involucrados.

La presentación de la querella coincidió con la formalización por estos hechos de dos alumnos del liceo.

Como los acusados pertenecen al centro de alumnos, la directiva se encontraba en el lugar, lo mismo que integrantes del grupo “Mujeres por la memoria”, una de las cuales fue detenida ayer por agredir a un carabinero al ser fiscalizadas en Camilo Henríquez creyéndose que portaban elementos incendiarios en sus mochilas.

Cuando vieron a las autoridades y al rector, comenzaron los insultos.

El presidente del centro de alumnos Lautaro Vásquez sostuvo que la manifestación fue una decisión colectiva y no un llamado de la organización y descartó daños causados por los estudiantes.

Los jóvenes quedaron en libertad, sin medidas cautelares, con tres meses de plazo para investigar los delitos que se le imputan, que detalló la defensora penal juvenil, Marcia Soto.

Uno de los jóvenes adujo problemas de salud mental, que de comprobarse lo harán inimputable.

Pedro Cid (RBB)

Pedro Cid (RBB)