En relación a las medidas que se adoptarán por la conmemoración del 11 de septiembre en la región de Valparaíso, el intendente Ricardo Bravo señaló que los focos conflictivos de la zona se encuentran identificados.

La situación fue analizada este martes con la autoridad policial, donde se estableció una serie de procedimientos que aplicará Carabineros para minimizar los efectos que puedan presentarse este día y que pongan en riesgo a la comunidad.

Entre las medidas, se solicitó el cierre de casas de estudios que, según afirmó el intendente, han sido focos permanentes de violencia, para prevenir que sucedan los hechos que se presentan todos los años en esos lugares.

El general Julio Pineda, al respecto, informó que desde la noche de este miércoles se dispondrá de personal preventivo que se cifra en 1.000 carabineros, los que estarán dispuestos para el resguardo de la comunidad concentrados en los puntos críticos de la ciudad puerto y también en el resto de la región. Lo anterior, a fin de dar seguridad a la población y evitar los comunes hechos de violencia que se generan en estas fechas.

Pineda agregó que estará dispuesto personal de Fuerzas Especiales -que tiene contingente propio- y, a su vez, se han destinado secciones de control del orden público de todas las unidades para abordar las eventualidades que se generen durante los días 10 y 11 de septiembre.