Este lunes se realizó la audiencia de reformalización de los involucrados en el crimen de un lactante al interior del fundo Los Culenes de Colliguay.

Seis de los ocho imputados que integraban la secta liderada por Ramón Castillo Gaete, autodenominado “Antares de la Luz”, habían sido formalizados en primera instancia como cómplices del homicidio, pasando ahora a ser imputados como encubridores.

El 23 de noviembre de 2012, un bebé fue quemado vivo al interior del fundo durante un supuesto ritual, hecho que meses más tarde dio a conocer la hermana de la mujer que dio a luz.

Cabe señalar que existen dos imputados que no participaron en la audiencia de esta jornada. Se trata de Natalia Guerra, madre del menor formalizada por parricidio y Pablo Undurraga, por homicidio calificado.

La Fiscalía podría rebajar las penas de los imputados, quienes ahora arriesgarían hasta 3 años de cárcel. Sin embargo, deberá ser evaluado por el tribunal con las atenuantes de irreprochable conducta anterior y la colaboración prestada durante la investigación del caso.

En la audiencia estuvo la directora nacional de Sename, Marcela Labraña, ya que dicha entidad de gobierno es querellante en este proceso legal.

Labraña fue enfática en señalar que la institución espera una pena efectiva de cárcel para los imputados, manifestando que sería una muy mala señal por parte de la justicia al dejar en libertad a alguno de los acusados.

Por su parte, el abogado Javier Arévalo, defensor de Carolina Vargas, dijo estar a la espera del juicio abreviado que serían bajo un sistema alternativo de cumplimiento de libertad, además de indicar que ante la oposición del Sename a esta medida, ellos tendrán que argumentar su petición.

No obstante, tras la reformalización, el juez del caso, Milenko Grbic, analiza la posibilidad de un juicio abreviado, donde se definirán las condenas y que sería este martes.