El presidente de Ucrania Petro Poroshenko efectuó el lunes una visita sorpresa a Mariupol (este), donde declaró que era imposible ganar el conflicto sólo por medios militares.

Vestido con un uniforme militar, el presidente prooccidental recalcó en esta ciudad, donde se han registrado combates pese al acuerdo de alto el fuego con los rebeldes, la liberación de cientos de personas capturadas por los insurgentes.

Esto refleja, según el mandatario, el “buen funcionamiento” del acuerdo concluido en Minsk con los separatistas, pese a los “10 a 12 casos” diarios de violación del alto el fuego.

Una fuente gubernamental ucraniana afirmó en la noche del lunes que los rebeldes habían liberado a unas 650 personas que habían capturado, sobre un total de 1.200 prisioneros.

Poroshenko también dijo que era “imposible ganar el conflicto sólo por medios militares”.

“Mientras más se aumenta la presión, más aumentan las tropas rusas en nuestro territorio”, dijo el mandatario ucraniano en una conferencia de prensa en inglés.

La “manera más rápida” de alcanzar la paz es la retirada de las fuerzas rusas, insistió.

Esta tregua entre el gobierno de Kiev y los rebeldes prorrusos, anunciado el viernes para poner fin a cinco meses de combates que dejaron 2.600 muertos, ha sido acogida con extrema prudencia por los occidentales.

Desacuerdos entre países de la UE sobre sanciones a Rusia

Alegando que Moscú ha desplegado tropas en la región, los 28 estados de la UE procuraban llegar a un acuerdo para decretar nuevas sanciones económicas contra Rusia.

Los embajadores de los 28 países celebraban este lunes una “reunión extraordinaria” en Bruselas sobre las “modalidades para implementar las sanciones” contra Rusia acordadas en principio el viernes y que debían aprobar formalmente este lunes, indicaron fuentes diplomáticas.

“No todos los países miembros” estaban de acuerdo con la propuesta de sanciones presentada la semana pasada por la Comisión Europea, indicó otra fuente diplomática.

Las nuevas sanciones de la UE limitarían el acceso a los mercados financieros a las compañías rusas del sector petrolero Rosneft y Transneft así como a la filial petrolera de Gazprom, indicaron en la mañana del lunes fuentes diplomáticas.

Fuentes diplomáticas afirmaron que los desacuerdos tenían relación con la posibilidad de levantar rápidamente las sanciones si la tregua duraba.

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, había afirmado el domingo que la UE estaba “dispuesta a dar marcha atrás” en sus sanciones si el alto el fuego en el este de Ucrania es “duradero” y si las negociaciones de paz empiezan.

Rusia ya advirtió que reaccionaría ante nuevas sanciones europeas.

El primer ministro, Dimitri Medvedev, advirtió que Rusia respondería prohibiendo a las compañías occidentales sobrevolar su territorio, en los trayectos entre Europa y Asia, lo que puede incrementar notablemente los costes.

Moscú también afirmó que el presidente ruso Vladimir Putin, y Poroshenko acordaron el lunes durante una conversación telefónica proseguir el diálogo tendente a terminar con el conflicto en el este de Ucrania.

Ambos mandatarios hablaron de los “pasos para propiciar una salida pacífica de la situación (actual) en el sureste de Ucrania”. “El diálogo habrá de continuar”, afirmó la presidencia rusa en un comunicado.

La presidencia ucraniana puntualizó que Putin y Poroshenko “siguieron coordinando las acciones de respaldo al alto el fuego”.

En el terreno, pese al alto el fuego, han estallado combates en la zona de Mariupol, última gran ciudad de la región aún bajo control ucraniano.

Interrogado por la AFP este lunes, el comandante de un puesto de control a la salida de la ciudad, que no quiso dar su nombre, indicó que “cayeron misiles durante la noche” y que “a dos km de aquí había combates”.

“Estamos reforzando los puestos de control”, añadió, mientras tres ‘bulldozers’ operaban aparentemente para reforzar las trincheras defensivas.