El piloto chileno Patricio Cabrera, finalista de las dos ediciones del Dakar en que participó, cumplió uno de sus anhelos y competirá en la próxima versión del rally cross country más importante del mundo a desarrollarse entre el 4 y 17 de enero con la nueva Kawasaki KX 450, moto especial para rally cross que supera con creces al anterior vehículo con el que se posicionó como uno de los pilotos con mayor proyección del país.

“Estamos muy contentos, pues durante los primeros días de octubre debe llegar la nueva moto. Era un tema que se había conversado con Kawasaki, pues la KLX 450R con la que corrí el último Dakar, el Ruta 40 y el Desafío Guaraní, ofrecía algunas ventajas, como por ejemplo, alcanzar velocidades altas en tramos limpios. Ahora, en cambio, podré llegar a 170 km/h y así no perder tiempo con mis rivales”, declaró el raidista.

El tema de la velocidad punta no es menor, pues además le permitirá a ‘Hulk’ preparar una estrategia diferente. “Como sabía que mi moto no llegaba a cierta velocidad, debía esforzarme el doble en zonas trabadas para recuperar tiempo y, además, nunca descuidarme un segundo en la navegación, esa era la única forma de estar en el grupo de avanzada, lo que de paso provocaba un mayor desgaste sicológico”, dijo.

Otro aspecto que destaca en la renovada Kawasaki KX 450 es el tecnológico, puesto que ahora incorpora inyección directa, dejando atrás el carburador. “Tener inyección nos pone a la par con las principales motos, pues facilita el trabajo del motor y no debemos estar preocupados de si nos toca una etapa en altura o al nivel del mar”, indicó el oriundo de Coyhaique, quien además reconoció que espera una mejoría considerable en los resultados, pues “la nueva moto es casi 20 kg más liviana, lo que me permitirá también mejorar algunos segundos”.

La llegada de la moto proveniente desde Estados Unidos se aguarda para los primeros días de octubre y de inmediato se enviará a Argentina, donde se le incorporará el kit de rally en el team RPM Kawasaki, donde Patricio Cabrera es el único chileno.

“Nuestro equipo en Argentina ya está esperando que les enviemos la moto, sabemos que entramos en la recta final de la preparación para el Dakar, por lo mismo, decidimos no ir al Desafío Inca, pues no se alcanzaba a preparar esta nueva moto. Así es que nos concentraremos en el Dakar, seguiremos con el exigente trabajo físico y en los últimos meses se profundizará en la puesta a punto de la moto”, señaló.

En paralelo a la preparación del Dakar, Cabrera también se encuentra trabajando en repetir el compromiso ecológico que realizó este año, y que consistía en donar 100 árboles por cada etapa que terminará del rally. Dichos árboles se plantaron en su natal Coyhaique y sirvieron para apoyar la reforestación de la Patagonia.

“Estamos trabajando para repetir la apuesta ecológica. Nuestra idea es buscar ahora otro lugar, por lo que estamos a la espera de que alguna empresa quiera apoyarnos con el tema. Esperamos que se pueda realizar, pues creemos que mediante una competencia tan prestigiosa podemos ayudar a al grave problema que vive el medio ambiente”, finalizó el piloto nacional.