La comediante y presentadora del programa estadounidense “Fashion Police” Joan Rivers salió de terapia intensiva y fue trasladada a una habitación en el hospital de Nueva York donde se encuentra ingresada desde el jueves pasado, indicó el miércoles su hija en un comunicado.

“Mi madre ha sido trasladada de terapia intensiva a una habitación privada donde es mantenida de manera confortable”, señaló Melissa Rivers en un corto texto en el que agradece por el “continuo apoyo” a su madre.

Joan Rivers, de 81 años, fue ingresada de urgencia el pasado jueves en el hospital Mount Sinaí tras haber sufrido un paro cardíaco y respiratorio cuando estaba siendo sometida a una intervención en las cuerdas vocales en un consultorio médico en el Upper East de Nueva York.

Desde entonces, la presentadora permaneció en terapia intensiva e inconsciente, según se desprendía de los cortos comunicados brindados por su hija. Medios locales afirmaron que fue inducida a un coma tras su llegada al hospital.

Rivers, cuyo verdadero nombre es Joan Alexandra Molinsky, es la más ácida y grosera de una generación de comediantes y presentadoras de TV estadounidenses que incluye a Lucille Ball y Phyllis Diller (ya fallecidas), así como a Carol Burnett.

En los últimos años de su carrera, Rivers se volvió tan conocida por sus múltiples cirugías plásticas –de las que ella misma se burla– como por su trabajo.

En su programa “Fashion Police”, la implacable y ocurrente comediante tiene la última palabra sobre lo que está bien o mal llevado en las alfombras rojas.

Nacida en Brooklyn (sudeste de Nueva York), hija de un exitoso médico, se crió en Larchmont, en los suburbios de la ciudad.

Graduada en el Barnard College Phi Beta Kappa, comenzó a presentarse en shows de improvisación cómica bajo el nombre de Joan Rivers y, tras varios años trabajando de día como secretaria y actuando de noche, logró abrirse camino en su profesión en 1965 en la emisión “Tonight Show”.