Dos moteles curicanos no pasaron la prueba de higiene y seguridad, en el marco de la fiscalización realizada por la seremi de Salud Valeria Ortiz, la Gobernadora provincial de Curicó Cristina Bravo y Carabineros.

Esta fiscalización forma parte de un programa que desarrolla en distintas provincias la seremi de Salud, con la finalidad de dar seguridad a la población en diversos ámbitos, tales como lo fue con los juguetes para el Día del Niño, locales de comida rápida y en este caso, moteles.

Los locales revisados están ubicados en las cercanías de la Ruta J-60, donde se fiscalizó que contaran con control de plagas y las medidas de higiene y seguridad que les exige la normativa.

La autoridad sanitaria señaló que su trabajo “abarca muchas aristas y en este sentido necesitamos dar seguridad de inocuidad a los pasajeros de estos moteles, por eso nuestra preocupación y procuraremos que esta sea la primera de varias fiscalizaciones que haremos en estos recintos”.

Dentro de los moteles visitados, Buca-Ruca de Rauco pasó todas las pruebas sanitarias y de seguridad. No así el caso de otros dos moteles del sector (Copas Cabañas y Seven Cups) debido a que el agua que poseen es de pozo y no se encuentra clorada. En el caso de Seven cups, además tuvo problemas de falta de control de plagas y extintores, entre otros.

Al respecto la Gobernadora Cristina Bravo dijo que “es preocupación para nuestro gobierno no fiscalizar sólo los juguetes sino que estar presentes en las distintas áreas de acción, con la finalidad de resguardar la seguridad de las personas”.

Indap

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