Durante el segundo trimestre del año, la región de Tarapacá registró una disminución de su actividad económica del 6,1%, en comparación al mismo período del año anterior, acumulando el primer semestre del año una variación de -0,3%.
Este resultado se explicaría por la incidencia negativa en seis de los diez sectores que componen el Indicador de Actividad Economica Regional (Inacer), donde el efecto proporcionado por el terremoto durante el mes de abril de este año, tuvo importantes repercusiones en la actividad regional.
Por ejemplo, la Construcción incidió negativamente, producto de la menor inversión en obras de ingeniería pública, específicamente, por una menor inversión en obras de vialidad.
Otro sector que bajó de forma significativa en este resultado fue Comercio, Restaurantes y Hoteles, debido a las menores ventas en la zona franca, por el cierre temporal de la misma, debido a daños ocasionados por el movimiento sísmico.
Por otra parte, Minería incidió positivamente debido al crecimiento en la producción de cobre respecto al mismo trimestre del año anterior, pero no pudo contrarrestar el decrecimiento en la actividad regional.
El crecimiento minero se debe a una baja base de comparación producto de mantenciones realizadas en algunas faenas durante el año 2013.
