La Fundación Santiago Mío y la Municipalidad de Santiago están coordinando intervenciones de limpieza de muros, junto a vecinos y voluntarios, que buscan generar conciencia en torno al tema de los rayados en los muros, para recuperar fachadas de la capital y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

Un grupo de personas, incluyendo familias con niños, participaron este sábado de una actividad encabezada por la fundación y el municipio en la capital, borrando grafitis en los muros de casas y edificios en la calle Vicuña Mackenna.

Esta iniciativa partió con los gemelos Leonardo y Héctor Godoy, creadores de la Fundación Santiago Mío. Ambos comenzaron junto a pequeño grupo de personas a repintar paredes deterioradas del barrio Lastarria. Su ejemplo trascendió rápidamente y tras un diálogo con el Municipio de Santiago se acordó trabajar en conjunto.

“La Fundación Santiago Mío se acercó a la municipalidad para proponernos realizar una alianza y trabajar por la limpieza de los muros de Santiago. Ellos están en una campaña para juntar mil socios y darle sustentabilidad a este trabajo en el tiempo, y nosotros como municipio vamos a complementar ese trabajo con nuestros equipos, la maquinaria que tenemos, aportar también material y coordinación con los vecinos de los distintos barrios en que iremos trabajando”, planteó la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.

Según Tohá, lo que hay en la comuna son mayoritariamente rayados que “dan una sensación de fealdad, de abandono, de degradación del espacio público. En una calle que es pintada y limpiada, florece la arquitectura, se potencia la identidad del barrio y se genera un impacto gigantesco”.

En cuanto a extender este plan a más sectores de la comuna, precisó que lo que “tenemos hoy es un plan en la Alameda que ha permitido limpiar los rayados de las fachadas de esa calle, y que además tiene un mecanismo de mantención en el que apenas se ensucia una fachada, es limpiada y pintada nuevamente”.

“Esto que tenemos en la Alameda queremos replicarlo en las calles de gran flujo, que son las más vulnerables a los rayados. Pero eso lo queremos complementar con calles intermedias y sectores residenciales, donde se requiere un trabajo más activo de los residentes. Si combinamos todo eso; una acción proactiva desde los vecinos, organizaciones de la sociedad civil como la Fundación Santiago Mío y una política permanente de la comunidad podemos devolverle sus muros a la ciudad”.

Por su parte, Leonardo Godoy se manifestó esperanzado de que más voluntarios y sobre todo las empresas se van a comprometer con esta iniciativa e invitó “a todos los vecinos, y muy especialmente a los jóvenes, a sumarse a esta iniciativa, estamos convencidos que la experiencia les va a encantar y será responsabilidad de todos dejarles una ciudad más linda y amable a nuestros hijos y a las futuras generaciones”.

Maribel Fornerod | Agencia UNO

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