Con buenos ojos observan desde la industria panificadora de Osorno la aprobación en la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados el proyecto de la reforma tributaria, la cual fue despachada al Senado para su discusión el próximo martes.

Así lo hizo ver Esteban González, primer director de la Asociación Gremial de Industriales del Pan, quien sostuvo que el impasse inicial con el Gobierno por el proyecto, -que provocó incluso la conformación de agrupaciones de emprendedores, pequeños y medianos empresarios a nivel país- se encuentra prácticamente superado tras las indicaciones ingresadas a la iniciativa, luego de los acuerdos políticos impulsados.

González remarcó que por fin están siendo escuchados como sector, generando un proyecto de ley que cumple con los objetivos planteados para recaudar más ingresos para el país, sin afectar a la clase media.

De acuerdo a González, las modificaciones al proyecto que regularizan las compras a supermercados y la búsqueda de mecanismos alternativos al Fondo de Utilidades Tributarias para evitar el estancamiento de las empresas son más que buenas señales para el sector.

Con ello, dijo Esteban González, se podrá elegir a través de la contabilidad la forma más beneficiosa tanto para el pequeño y mediano empresario como para el Estado la forma de aportar tributariamente al país, sin afectar el crecimiento de la actividad privada.

Entre las indicaciones aprobadas por la comisión de Hacienda de la Cámara está un alza en el impuesto al tabaco, que llegará a un 40% y a los alcoholes destilados al 31,5%, mientras que al vino y cerveza al 20,5%, mientras que las bebidas analcohólicas bajarán a un 10%.

En tanto, el gravamen a las empresas alcanzará un 27%, estableciéndose además un impuesto a la compra de autos nuevos, tanto petroleros, como diésel, tributación que se aseguró será muy bajo, no superando el 1,2%.