Siete días cumple la toma que mantienen los pescadores de la comuna de Caldera, en la entrada al puerto Punta Padrones en la región de Atacama, perteneciente a la minera Candelaria, en rechazo a la contaminación que produce la empresa en las aguas del sector.

El motivo de la movilización es el descontento con las instalaciones de dicha minera, cuya contaminación eleva la salinidad del agua y disminuye la oxigenación de la bahía del puerto de Caldera.

Esto tiene como consecuencia la muerte de algas y moluscos en todo el borde costero.

Así lo indicó la presidenta del sindicato de pescadores artesanales Sical, Ondina Arancibia, quien aseguró que durante 20 años la compañía ha trabajado sin apoyar a los trabajadores de la zona.

A la movilización se adhieren cuatro sindicatos de pescadores que agrupan un total de 300 trabajadores. Éstos afirmaron que mantendrán la toma hasta recibir una respuesta por parte de la empresa y las autoridades.