El quinto y último carguero automático europeo, el ATV Georges Lemaître, se acopló con éxito este martes a la Estación Espacial Internacional (ISS) a unos 410 km de la Tierra.

“Era el quinto y último carguero de tipo ATV, y como todos los anteriores se realizó con éxito”, dijo la directora de vuelos del Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) desde el centro de control de Toulouse en el sur de Francia.

El carguero sin tripulación y del tamaño de un autobús de dos pisos londinense, había sido lanzado al espacio el 30 de julio por un cohete Arianne desde la Guayana francesa.

El ATV permanecerá acoplado durante un período de unos seis meses como “módulo adicional” para los seis astronautas que se encuentran a bordo de la ISS.

Sus ocupantes son en este momento tres rusos (Oleg Artemyev, Alexander Skvortsov y Max Suraev), dos estadounidenses (Steve Swanson y Reid Wiseman) y un alemán (Alexander Gerst).

Gerst, de la Agencia Espacial Europea (ESA), será quien supervise la descarga de casi 6,6 toneladas del flete, que incluye unos 850 litros de agua potable, el mayor volumen transportado hasta ahora al espacio, y tres toneladas de combustible. También les trajo 2,6 toneladas de alimentos, 50 kilos de café, vestimenta –no hay lavadora allá arriba– y equipos de investigación, entre otros.

Al final de su misión, a comienzos de 2015, el transportador “Georges Lemaître”, así bautizado por el físico belga padre de la teoría del Big Bang, será llenado con los desechos no peligrosos producidos a bordo de la estación.

Luego se desprenderá de la ISS y será enviado hacia la atmósfera terrestre en la que todo el material y el propio carguero se desintegrarán.

La ESA finalizará entonces con su contribución al programa de la ISS, el cual según la propia agencia tiene un costo de un monto de 4.200.000 millones de euros.

La tecnología desarrollada para el ATV no desaparecerá con el fin de esta participación. La misma contribuirá en particular en la construcción del módulo de servicio para la cápsula Orión, de la NASA estadounidense, destinada a transportar astronautas a la Luna de aquí a 2017/2018.

Con el fin de la serie de los ATV, la ISS será provista de todo lo necesario por cápsulas rusas del tipo Progress y cargos operados por empresas estadounidenses contratadas por la NASA, como SpaceX (Dragón) y Orbital Sciences (Cisne).