Israel no tiene “nada contra la gente de Gaza” y quiere ayudar a que se desembarace de la “tiranía” de Hamas, afirmó este jueves el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a la cadena estadounidense Fox News.
“No estoy seguro de que la batalla haya terminado”, dijo un mes después del inicio de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
“Creo que hemos debilitado significativamente las capacidades de Hamas”, añadió, señalando que quizás lo que quedan son los túneles todavía por descubrir bajo la frontera entre Gaza e Israel.
“Todo depende de si quieren continuar esta batalla. Yo pienso que debemos encontrar una solución pacífica, si se puede”, declaró Netanyahu a pocas horas del fin del cese al fuego, que expira este viernes en la mañana.
La ofensiva sobre Gaza ha dejado un balance de 1.886 palestinos muertos, entre ellos 430 niños y adolescentes, según el ministro de Salud palestino.
Unicef informó que el 73% de los muertos son civiles.
“Estos saldos son crueles pero no es nuestra intención matar a civiles”, dijo Netanyahu.
“Israel actúa de esta manera: nosotros atacamos a los combatientes y matamos accidentalmente a civiles. Los terroristas lo hacen exactamente a la inversa”.
