El arquero chileno Claudio Bravo evitó dramatizar por su desafortunado debut en el pórtico del FC Barcelona, donde un error suyo le dio el triunfo este miércoles por 1-0 al Napoli en amistoso jugado en Ginebra, Suiza.

El capitán del seleccionado nacional fue titular y en el segundo lapso cometió un yerro que terminaría siendo clave. Blerin Dzemaili sacó a los 79 minutos un potente remate desde 25 metros y el balón se le pasó entre las manos al formado en Colo Colo.

Consultado por su desempeño ante la escuadra donde milita Eduardo Vargas, Bravo declaró que “estaba disfrutando de un partido cómodo, en el que lo poco que me había llegado lo resolví sin problemas”.

Sin embargo, el meta nacional no tuvo problemas para aceptar su culpa en el tanto italiano: “El gol fue un error mío, sin duda, un error de concentración. Vi que chutaba de lejos y creí que la atajaría”.

Además, el nacido en Buin se mostró tranquilo al señalar que “sé lo que valgo y sé de lo que soy capaz. Son cosas que pasan en esta posición. Seguiremos trabajando. Espero que no vuelva a pasar”.