Aferrados a la fe y a su simpatizante más ilustre, el papa Francisco, los hinchas de San Lorenzo están dispuestos a todo por asistir a la primera final de la Copa Libertadores 2014 ante el paraguayo Nacional en Asunción, incluso a permutar un auto por un par de boletos.

Así lo entendió Milton Díaz, quien en un impulso ‘cuervero’ lanzó vía Twitter la insólita permuta: “Cambio Peugeot 206 modelo 2008, 55.000 km por dos entradas contra Nacional!”.

“No es una joda” (broma) aclara el tuit que corrió como reguero de pólvora en las redes sociales desde que lo colgó el sábado pasado en un arranque desesperado que sólo otro corazón hincha puede comprender.

Desde entonces este joven de 21 años y estudiante de periodismo en la capital argentina recibió cientos de respuestas y mucho respaldo de otros hinchas de San Lorenzo aunque sigue sin poder concretar la permuta a horas de la primera final que se jugará este miércoles en la capital paraguaya.

“Salvo que alguien me consiga algo y se comunique por Twitter, lo veremos por la tele”, lamentó Díaz que sigue esperando un milagro del última hora.

El fanático había planeado viajar a Paraguay junto a su padre, Fernando de 54 años y fanático de San Lorenzo, pero las entradas se hicieron humo en tres horas cuando se pusieron a la venta el sábado y se quedó con las manos vacías.

“Yo soy tercera generación de ‘cuervos’, es una experiencia única vivir esto con él”, justificó ante la prensa sobre la desmesura de su oferta que dice contar con el apoyo de su padre.

Dos días antes del inicio de la venta de entradas decenas de simpatizantes comenzaron a acampar frente a las taquillas en una sufrida vigilia por obtener unos de los 4.500 boletos que se pusieron a la venta.

El club debió incluso adelantar 24 horas la venta por pedido expreso de la policía que temía desmanes por la impaciencia creciente de cientos de simpatizantes.