A través de una declaración pública, el gobierno de Chile condenó este lunes el ataque israelí de la víspera contra una escuela de las Naciones Unidas en la ciudad de Rafah en Gaza, en el que murieron al menos 10 palestinos, incluido un niño.

“Chile se une a la condena del Secretario General de Naciones Unidas ante este hecho y le expresa su solidaridad, que hace extensiva al Gobierno y pueblo de Palestina”, indica el texto.

Se trata de la tercera vez en diez días que un centro de las Naciones Unidas ha sido alcanzado por un bombardeo israelí.

“Chile subraya con consternación el hecho de que las coordenadas de dicha escuela y la circunstancia de estar sirviendo de refugio a civiles habían sido informadas al Ministerio de Defensa de Israel en numerosas oportunidades, precisamente para prevenir cualquier ataque”, señala.

En ese sentido, desde la Cancillería se subraya que la sospecha de la presencia de militantes de Hamas en las proximidades del edificio, “de ninguna manera puede justificar jurídicamente acciones militares que ponen en peligro a miles de civiles”.

Por lo anterior, el Gobierno chileno calificó este ataque como “una nueva y grave violación del Derecho Internacional Humanitario, como también de la protección debida a instalaciones de Naciones Unidas y al personal de la Organización”.

“Por las circunstancias señaladas, los ataques contra civiles podrían constituir crímenes de guerra, lo cual debe ser investigado y los culpables llevados a la justicia”, agrega.

“Chile señala una vez más y con la mayor firmeza que Israel tiene la obligación jurídica y moral de ajustar sus acciones militares al Derecho Internacional Humanitario, que consagra el principio de distinción entre civiles y combatientes, como también el de proporcionalidad en el uso de la fuerza, que condiciona y limita la legítima defensa”.

Asimismo, el Gobierno llamó a Chile detener lo que califica como “locura colectiva” que ha provocado la muerte de miles de civiles, incluyendo mujeres y niños, y a iniciar a la brevedad conversaciones de paz, basadas en la propuesta presentada por Egipto.